A menos de un mes desde el último asalto a un banco, tres delincuentes robaron este jueves a plena luz del día una sucursal del Credicoop de Pérez. Hubo una persecución que llegó hasta Villa Gobernador Gálvez y de la que participaron agentes del Comando Radioeléctrico, la Policía de Acción Táctica (PAT), la Policía de Investigaciones y de Gendarmería que lograron arrestar a todos los sospechosos. Se desconoce aún el monto robado. Además, quedó demorada una quinta persona y buscaban averiguar si tenía participación en el hecho.
Según informó el periodista Hernán Funes de Radio 2, el hecho se registró este jueves poco antes de las 11 en la sede del Credicoop de San Martín al 1800 de la vecina localidad de Pérez.
En tanto consultado por la periodista Almudena Munera del programa De 12 a 14 (El Tres), el comisario Héctor Gamboa precisó que los ladrones se acercaron hasta el banco en un Ford Focus Gris del que simularon bajar a una persona con dificultades motrices. Se trataba, en realidad de un ladrón más. El grupo ingresó entonces de esta manera al banco, uno de ellos en silla de ruedas y con cuello ortopédico. Pero una vez adentro descubrieron sus verdaderas intenciones, tomaron el dinero de una sola caja y huyeron a toda velocidad en el Focus gris.
Tras una intensa persecución que llegó hasta Villa Gobernador Gálvez, la policía logró arrestar a cuatro sospechosos a quienes les incautaron una ametralladora FMK3, otra Halcón y un arma 9 milímetros. También secuestraron el auto y unos handies.
A su vez, Gamboa aclaró que se desconoce si las armas secuestradas fueron utilizadas durante el asalto. Señaló que fueron encontradas dentro del auto y que los ladrones habían usado “armas de puño” para acceder a la caja.
En lo que va del año se registraron otros seis episodios delictivos contra tres sucursales del banco Municipal –de Fisherton, de Empalme Graneros y del centro–; dos del Credicoop, de General Lagos de la zona sur rosarina; y una del Macro de Roldán.
¿Pistas para despistar?
Casi al mismo tiempo que se desarrollaba el golpe contra el Credicoop, dos llamados entraron al 911. Uno avisaba sobre el cadáver de una joven mujer camino al camping del sindicato de Camioneros y otro sobre una bomba en un corralón de Uriburu y Oroño. Ninguna denuncia correspondía con una situación real.
Consultada por el periodista Fernando Carrafiello de Radio 2, una de las empleadas del corralón señaló que desde la policía creían que la amenaza habría actuado como distracción para cubrir el golpe al banco.