El presidente Néstor Kirchner respondió hoy con duros términos a los familiares de las víctimas del atentado que hace 12 años destruyó la sede de la Amia y les pidió "humildad y autocrítica". El primer mandatario aseguró que no acepta "chicanas cortas" y de "tan bajo calibre".
El jefe del Estado aprovechó un acto en Buenos Aires para criticar la posición de las autoridades de la comunidad judía en los comienzos de la investigación del ataque del 18 de julio de 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (Amia), que causó 85 muertos y centenares de heridos.
Kirchner aprovechó un acto en el partido bonaerense de San Isidro para responder a los reclamos que ayer le realizaron familiares de las víctimas del atentando
También cuestionó "los lazos" de esos dirigentes con el gobierno de Carlos Menem y con el ex juez Juan José Galeano, que dirigió durante casi una década la pesquisa y al que se destituyó el año pasado por mal desempeño de sus funciones. "Yo no tengo la culpa de los acuerdos de allá, de esos dirigentes que los representaban a ustedes con el gobierno menemista. Yo era gobernador de Santa Cruz", dijo el primer mandatario, y señaló que él y su esposa, la senadora Cristina Fernández, "nunca" avalaron el proceso que siguió Galeano.
Kirchner destacó las medidas que tomó su gobierno en la búsqueda por esclarecer el ataque, como la eliminación del secreto de Estado para funcionarios que fueron citados a declarar y la apertura de los archivos de la Secretaría de Inteligencia del Estado (Side). Además, reiteró que está "abrazado a todos los argentinos y a todas las comunidades y a la judía para buscar la verdad sobre el atentado", que, aclaró, "fue a argentinos que practican la religión judía".
Debido a una visita a Paraguay, Kirchner faltó este martes al acto en homenaje a las víctimas que se celebró al cumplirse doce años del atentado, en el que recibió por primera vez críticas de los familiares y dirigentes de la comunidad judía, que le reclamaron avances en la investigación. "Estoy tratando de que haya justicia y se condene a los terroristas. No soy un mago, soy un tipo honesto que no ata las manos ante ninguna impunidad", remarcó el presidente.