El ministro de Justicia, Germán Garavano, señaló este domingo que no cree que a la ex presidenta Cristina Kirchner le quiten sus fueros como ocurrió con su ex ministro Julio De Vido, y consideró que hubo "muchos apresuramientos" en el caso Santiago Maldonado.
"La verdad es que no le veo, no le veo", sostuvo el ministro sobre si la senadora electa puede pasar por el mismo proceso de desafuero que el que atravesó De Vido la semana pasada, durante una entrevista con radio El Mundo.
Al referirse a la situación judicial de la ex mandataria, Garavano precisó que "los procesos están avanzando naturalmente" y dijo esperar "que sigan en ese rumbo, y que sea en los casos donde hay procesamientos que se eleve a juicio oral para que el fiscal demuestre lo que debe demostrar, y si no lo logra demostrar que los jueces dispongan".
En cuanto a la posibilidad de un desafuero de el diputado Máximo Kirchner, Garavano indicó que "si no hay pedidos de jueces justificados, debemos ir haciéndonos fuertes en la democracia y trabajar para construir un país mejor".
Al referirse al desafuero de De Vido, el ministro consideró que se llevó "el relato de las causas judiciales a algo como un partido de fútbol" pero resaltó como importante el juicio oral y público que tiene implicado al diputado y "ahí el fiscal debe demostrar que el acusado es responsable", porque "el desafuero se requiere para la detención y para ninguna otra cosa".
Por otra parte, Garavano relevó que la Secretaría de Derechos Humanos evaluó constituirse como querellante" en el caso Santiago Malonado "pero la familia no quiso, por lo que el gobierno se puso a disposición del juez".
"Hay que esperar a que termine el peritaje y los estudios complementarios; ser prudentes y esperar a que termine todo", indicó, aunque agregó que el hecho de que no haya "violencia en el cuerpo es un elemento importante" y que "lo que nos debe enseñar este caso es que hubo muchos apresuramientos".
Sobre el caso Milagro Sala, el ministro afirmó que el gobierno hizo "contribuciones y participó de las audiencias de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, siendo reconocidos" por el organismo, con el que "se está trabajando muy bien" y "tratando de que se cumplan sus recomendaciones".