Una mujer recuperó su libertad tras permanecer 12 años en prisión por el crimen de su pareja ocurrido en Arequito en 2005. La condena firme fue revertida tras la presentación de una prueba médica que dio vuelta la hipótesis que la Fiscalía: la mujer, quien también había resultado herida en el supuesto hecho, no se había auto infligido cortes en sus muñecas.
En diálogo con A Diario (Radio 2), el abogado Hernán Martínez, defensor de María Gauna, confirmó que su clienta recuperó la libertad a fin de año, después de estar 12 años en prisión por el presunto crimen de Omar Bartorelli el 6 de febrero de 2005. “Ese día María fue encontrada herida enfrente de su casam junto a su marido muerto, ambos con varias puñaladas. Ella fue condenada ese año a cadena perpetua y este año, la Corte Suprema de Santa Fe le otorgó la libertad”, señaló.
“Arequito fue sacudido por este caso. A María se la acusó de matar a su marido con mucha repercusión y bastante irregularidades. Tomamos el caso cuando ya había sido condenada, apelamos a través de un recurso de inconstitucionalidad ante la Corte Suprema que fue rechazado, vamos a la Nación que decice igual pero surgió una nueva prueba que demostró su inocencia, y la interpusimos como recurso de revisión final, muy específico, sobre cosa juzgada”, explicó.
Cuando Bartorelli fue hallado sin vida al lado de María, ella presentaba cortes en sus muñecas lo que dio a pensar que tras atacar a su pareja intentó suicidarse, a pesar de que ella implicó a un tercero en la escena. Martínez contó que el médico que la operó después del hecho declaró en su informe que los tendones de su mano derecha estaban totalmente cortados y no así los de la mano izquierda. La tesis del fiscal había sido que ella usó la mano derecha para cortarse la muñeca izquierda con lo cual, en esta situación, no habría podido manipular el arma para hacer lo propio con su otra mano.
Gauna, a lo largo de todo el procedimiento señaló a un tercero conocido. Es por esto que ahora que fue declarada inocente, se constituirá como querellante para que se investigue el crimen de su pareja.
“Fue muy difícil para ella todo este tiempo pero tenía fe y confianza en la Justicia. Confiaba en que iba a salir bien”, manifestó el letrado quien aseguró que a pesar de las condiciones de detención, María fue tratada muy bien en la alcaidía de Casilda donde estaba detenida. “Ella es maestra rural así que ayudaba a otras internas a estudiar”, reveló de sus días de encierro.