Un joven de 27 años, Farida, que estuvo secuestrada durante dos años por miembros del ISIS logró escapar gracias a la ayuda de la esposa de su captor. Entre ambas planearon una emboscada, se vengaron de él y huyeron.
La mujer estuvo en cautiva en Mosul, una ciudad al norte de Irak que se encuentra en disputa entre el Estado iraquí y el Estado Islámico allí fue golpeada y abusada sexualmente. "Traté de conservar mi honor, pero no lo logré. Fui abusada y golpeada, fui tratada como un animal. No tengo palabras para describir lo que me pasó", dijo Farida al Daily Mail.
Durante el tiempo que estuvo privada de su libertad la “esclava sexual” fue forjando una alianza con la esposa de secuestrador quién también tenía intenciones de escapar.
Entre ambas planearon una emboscada con militares iraquíes para liquidar al hombre y huir. Ellas colaboraron con las fuerzas de seguridad de ese país que en octubre pasado lanzaron un operativo para recuperar Mosul. Le dieron los datos de la ubicación del auto del secuestrador y así las fuerzas armadas realizaron un ataque armado a través de un drone y mataron al yihadista.
"Nos escondimos durante más de una semana para que crean que nosotras también estábamos en el auto y recién ahí nos pudimos escapar”, relató Farida quién en la actualidad se encuentra en un campo de refugiados en Erbil adonde se reunió con un su esposo.
