Olvidate de hacer pesas y ese tipo de ejercicios de fuerza. Si querés envejecer mejor apuestá por ejercicios de resistencia, como correr, nadar, esquí de fondo o andar en bicicleta. Te ayudará a envejecer mejor. Un estudio publicado en el "European Heart Journal" ha visto que este tipo de ejercicio ralentizaban o incluso revertían el envejecimiento celular.
El estudio ha analizado diferentes tipos de ejercicio -entrenamiento aeróbico, a intervalos o de alta intensidad, o entrenamiento de fuerza- con el fin de comprobar la forma en la que las células envejecen en el cuerpo humano.
Nuestro ADN está organizado en cromosomas en todas las células del cuerpo. Al final de cada cromosoma hay una secuencia de ADN repetitiva, llamada telómero, una especie de tapón del cromosoma y evita que sus extremos se deterioren. A medida que envejecemos, los telómeros se acortan y éste es un importante mecanismo molecular implicado en el envejecimiento celular. El proceso de acortamiento de los telómeros está regulado por varias proteínas. Entre ellos se encuentra la enzima telomerasa, que es capaz de contrarrestar el proceso de acortamiento e incluso puede aumentar la longitud a los telómeros.
Los investigadores dirigidos por el profesor Ulrich Laufs, de la Universidad de Leipzig (Alemania), reclutaron a 266 voluntarios jóvenes y sanos, aunque previamente inactivos, y los asignaron de forma aleatoria a seis meses de distintos tipos de entrenamiento o a un estilo de vida sin cambios -grupo de control-.
Los investigadores analizaron la longitud de los telómeros y la actividad de la telomerasa en los glóbulos blancos de la sangre extraída de los voluntarios al inicio del estudio y a los seis meses después.
El estudio identifica un mecanismo mediante el cual determinado tipo de ejercicio mejora el envejecimiento saludable. Puede ayudar a diseñar futuros estudios sobre este tema utilizando la longitud de los telómeros como indicador de la ‘edad biológica’ en futuros estudios de intervención», explica el profesor Laufs.
Un posible mecanismo que podría explicar por qué la resistencia y el entrenamiento de alta intensidad aumentan la longitud de los telómeros y la actividad de la telomerasa es que estos dos tipos de ejercicio afectan los niveles de óxido nítrico en los vasos sanguíneos, lo que contribuye a los cambios en las células.