Si estas estudiando para un examen o una presentación en el trabajo, dormir una breve siesta, sin caer en el estado de ensueño, te ayudará mucho. Descubrieron que es muy útil para memorizar todo lo aprendido con lujo de detalles.
Un estudio británico publicado en la revista Nature Scientific Reports, y reproducido por Muy Interesante, señala que este tipo de sueño “bloquea” los mecanismos de nuestro cerebro para olvidar, reduce el neurotransmisor dopamina y, por lo tanto, facilita la formación de la memoria.
¿Por qué se produce este fenómeno? Durante el sueño nuestras sinapsis se relajan, se mantienen flexibles, lo que mantiene la neuroplasticidad y la capacidad de aprendizaje de nuestro cerebro.
Para demostrarlo, los expertos diseñaron una prueba de memoria para evaluar la capacidad de retener información concreta. Le pidieron a 60 jóvenes, hombres y mujeres, de 21 años, en promedio, que miraran un conjunto de fotos, y que distinguieran entre fotos "antiguas" y "similares".
Si la capacidad de los participantes para retener los matices era buena, dirían que las fotos eran "similares". En cambio, si no se almacenaban recuerdos tan detallados, no percibirían mayores diferencias y las fotos podrían ser confundidas con “antiguas”.
Mientras a un grupo se lo hizo descansar un tiempo, al resto no. Los resultados demostraron que quienes sí lo hicieron fueron capaces de almacenar recuerdos tan detallados que les permitió obtener mejores resultados en la prueba.
Este nuevo hallazgo proporciona la primera evidencia de que un breve período de reposo silencioso puede ayudarnos a retener recuerdos más detallados e incorporar cosas nuevas.