La fibrosis quística es una enfermedad hereditaria de las glándulas que producen secreciones mucosas y sudoríparas Afecta principalmente los pulmones, el páncreas, el hígado, los intestinos, los senos paranasales y los órganos sexuales. Investigadores catalanes acaban de crear un parche cutáneo que permite detectarla.
Hasta el momento, esta enfermedad se constataba con un análisis del sudor, que en los pacientes afectados, es más salado de lo normal. A partir de ello, investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de Barcelona idearon un parche cutáneo autoalimentado que facilita su diagnóstico.
El elemento clave del parche es su batería de papel, que se activa al absorber el sudor y actúa de sensor para detectar la enfermedad, generando más o menos potencia según la conductividad del líquido con el que se moja. En caso de que sea más conductor, o sea más salado, genera más potencia, y viceversa, según publicó la revista Microsystems & Nanoengineering y reprodujo la Agencia Sinc.
Lo curioso es que está hecho con un circuito electrónico muy sencillo fácilmente imprimible. Si el resultado es positivo y el paciente padece fibrosis quística, enciende dos pantallas, de lo contrario enciende una.
“Este parche, que no depende de ninguna fuente de alimentación externa, sería muy fácil de usar y tendría un coste muy bajo, lo que permitiría realizar la medida sin instrumentos médicos externos, normalmente caros, haciéndolo accesible a un mayor número de hospitales y centros de salud”, explica uno de los autores, el investigador Juan Pablo Esquivel del Instituto de Microelectrónica de Barcelona (CSIC).