La Justicia de Córdoba avanza en un caso de maltrato animal que tuvo lugar en la capital de esa provincia el pasado 26 de mayo, cuando un hombre mató de un balazo a un perro. Según la sospecha que tiene la fiscalía, el agresor se enojó con el can porque supuestamente le había comido el asado que faltaba en su parrilla.
La perrita, llamada "Kika", fue asesinada al lado de su dueño, un nene de 10 años. La madre del pequeño contó que su hijo sufrió un estado de shock a partir del hecho. Según publicó el diario digital La Voz, el hombre fue embargado por 300 mil pesos e irá a juicio.
“Mi hijo tiene pesadillas. Se quedó con el trauma de que nunca pudo ayudarla. No se olvida de su mirada”, explicó la mujer.
La madre del nene consideró que fue otro el can responsable del acto y enfatizó la peligrosidad de manipular un arma de fuego cerca de niños. “Si me decía «tu perro me comió la tapa de asado», así no fuera mi perro, yo le iba a decir que me diera una semana hasta que cobrara y le pagaba. Lo iba a comprender porque no está bien que pase eso, por más que dejes abierta la puerta de tu casa”, agregó.
“Mi hijo era re contra sano y a raíz de esto cambió muchísimo su personalidad. Ya no quiere vivir más en esta casa”, concluyó la mamá del nene.