Los conflictos que surgen con la convivencia entre vecinos pueden llegar a ser una pesadilla. La discordia generada por ruidos molestos, la apropiación de espacios comunes o los problemas de humedad, entre otros, puede alcanzar punto de no retorno. Y pese a afectar profundamente la cotidianidad de los involucrados, difícilmente sean situaciones abordables desde la ley penal.

Para atemperar la conflictividad y llegar a un acuerdo mutuo, existe en Rosario la Oficina de Mediación. Un acceso a la justicia (en minúscula) que no posee las formalidades de un Tribunal y no requiere la representación de letrados caros. “Un espacio de escucha”, dice la funcionaria municipal Clara Lombardo, quien destacó las virtudes de este espacio que apunta a encontrar soluciones.

Lombardo habló este sábado con El mejor día de la semana (Radio 2) sobre los conflictos más frecuentes entre vecinos y el rol de los mediadores para solucionarlos. Destacó que existe un gran porcentaje de acuerdos derivados de las más de 3500 reuniones que se realizan en los distritos municipales, donde tienen sus oficinas este tipo de funcionarios especializados, también presentes en centros Cuidar.

“Cada distrito tiene su idiosincrasia”, dijo. Y entre los conflictos más comunes mencionó la presencia de música hasta altas horas de la noche, ya no en forma ocasional, pues el vecino es “tolerante”, sino cotidianamente. O el paso de motos a alta velocidad en pasillos peatonales donde juegan niños, o el hecho de estacionar los rodados en espacios comunes.

“La mediación es un espacio de encuentro, de escucha. De mirarse a la cara y entre todos tratar de encontrar una solución”, definió.

Otro foco de conflicto son los ruidos por construcciones, ya no en edificios que poseen reglamento interno y un consorcio, sino en viviendas particulares. Para este tipo de obras existe un marco legal a cumplir. “El Reglamento de Edificación es el que establece los horarios de trabajo; hay construcciones que requieren permiso de edificación y en otras, con un simple aviso, es suficiente. Lo que corresponde es que uno se acerque a la oficina de obras particulares de su distrito”, dijo.  

Lombardo dijo que los espacios de mediación son confidenciales y que existen muchos casos que son derivados desde el Ministerio Público de la Acusación, es decir, de la Justicia penal. “Siempre el límite es la ley y no todos los conflictos son mediables”, aclaró.