El ex senador nacional Rubén Giustiniani presentará este viernes un libro que analiza los 20 años de la sanción de la ley migratoria 25.871 en Argentina, sus impactos en la región y una lectura desde un presente en donde los discursos de xenofobia se expanden junto con la desigualdad. A contramano de eso, el autor del trabajo planteó: "Levantar muros o alambrados o transformar el mar Mediterráneo en una verdadera fosa no solo es inhumano sino además ineficaz". 

"Migración, un derecho humano. Balances y desafíos sobre la Ley de Migraciones argentina", de UNR Editora y Eudeba, incluye escritos de Giustiniani, abogados especializados, investigadores y migrantes activistas que fueron compilados por Paula Carello y Dabel Leandro Franco.

Este viernes a las 21, el exlegislador junto al rector de la UNR, Franco Bartolacci, y algunos de los autores brindarán una charla en la Feria del Libro (primer piso, sala Jorge Riestra).

Sobre el origen y el objetivo del libro, Giustiniani planteó que "la ley 25.871 de migraciones cambió el paradigma de la existente hasta ese momento que era la «ley Videla» de la dictadura y en consecuencia represiva y persecutoria que consideraba al migrante como chivo expiatorio de todos los males". 

"Esta norma –siguió–, que consideró a la migración un derecho humano, en 20 años demostró ser una herramienta de integración. La migración, de acuerdo a datos de los censos nacionales, no varió porcentualmente manteniéndose en un 4% del total de la población y los migrantes se insertaron en actividades complementarias de la economía. Se terminó de esta manera con la migración irregular que significaba que se recurriera a amnistías reclamadas por la pastoral migratoria".

Para el autor del libro y de la ley, "las migraciones en la actualidad y en el mundo tienen un profundo sentido social". "Como lo fuera el motivo de las migraciones de nuestros abuelos que llegaron a la Argentina y América a principios del siglo pasado, las razones de las 55 millones de personas que migraron desde Europa en aquel momento lo hicieron por paz, pan y trabajo, razones que se repiten en la actualidad", dijo a Rosario3. 

 

"Levantar muros o alambrados o transformar el mar Mediterráneo en una verdadera fosa no solo es inhumano sino además ineficaz porque a quienes buscan una manera de escapar de las guerras, el hambre y la muerte, eso no los detiene. Es momento de buscar otros caminos como lo hicimos con la ley migratoria argentina que es tomada como referencia en distintos países de América Latina y por las Naciones Unidas, es decir considerar el derecho de los migrantes a la educación, la salud, un trabajo digno y la reunificación familiar", agregó.

Tres puntos y el derecho al voto

 

Según plantea el inicio del trabajo, "la mayoría de las contribuciones que enriquecen esta publicación se centran en tres cuestiones fundamentales que destacan la originalidad e importancia de la ley 25.871. Estos aspectos cobran una relevancia especial en un momento en el que el país observa con preocupación la desacreditación del Parlamento Nacional y la aplicación excesiva de Decretos de Necesidad y Urgencia", advierten el autor y los compiladores.

Esos tres puntos centrales, se resumen así: la ley 25.871 fue la primera en el mundo en reconocer el derecho humano a migrar; el carácter participativo de su diseño y debate; y la aprobación de manera inédita por unanimidad en ambas cámaras.

Esa legitimidad de origen solo fue cuestionada en 2019 por el DNU 70/2017 (gobierno de Mauricio Macri) y posteriormente restablecida en su totalidad por el DNU 138/2021 (gestión de Alberto Fernández.

En su artículo Pablo Ceriani, agrega un cuarto ítem: "El desafío pendiente –e inexcusable,
luego de más de 150 años de inmigración– de reconocer el derecho a participar en elecciones nacionales a las personas migrantes que ya tienen determinados años como residentes, es decir, como integrantes plenos de nuestra sociedad”

Tema que fue eje del encuentro de la Red Nacional de Líderes Migrantes en Argentina (RNLMA) que se realizó en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).