Un grupo importante de empresarios y empleados gastronómicos de Rosario marchó a la sede local de Gobernación este jueves al mediodía y llevó a cabo una singular protesta: rompieron platos contra la vereda de calle Santa Fe, para visibilizar el pedido de "ayuda económica" a Nación, Provincia y Municipalidad "para que no se extinga la gastronomía" de la ciudad, según comentaron sus organizadores. También piden una mayor apertura horaria para el Día del Padre de este fin de semana.
Los propietarios de bares y restaurantes rosarinos que organizaron y participaron de esta protesta también reclaman una "ley de emergencia gastronómica provincial", en el contexto de las restricciones que impuso para el sector la pandemia de coronavirus.
El momento más simbólico de la protesta fue cuando, después de un breve discurso de dos de los organizadores, se hizo una cuenta regresiva y a continuación todos los presentes estrellaron contra el piso los platos que habían llevado al lugar.
Entre los reclamos de ayuda económica para "salvar" la actividad, que fueron los más significativos, también se coló el pedido para que el próximo domingo se pueda "ampliar" el horario de apertura de los locales para la celebración del Día del Padre.
