Un grupo de astrónomos detectó un conjunto de galaxias con un agujero negro supermasivo en su centro de tiempos antiguos del Universo, y aseguran que es un descubrimiento que permitirá saber más sobre la formación de estos enigmáticos eventos cósmicos.
Estos primeros agujeros negros, que habrían nacido con el hundimiento de las primeras estrellas, son "uno de los objetos astronómicos más difíciles de entender", comentó Marco Mignoli, del Instituto de Astrofísica de Bolonia, Italia, autor principal del estudio.
El hallazgo del Observatorio Europeo Austral (ESO) de Chile se ubica en el tiempo cuando el Universo no llegaba a 1.000 millones de años, es decir, el 10% de su edad actual (13.800 millones de años), según un estudio publicado en la revista Astronomy & Astrophysics.
Se trata de seis galaxias que se encuentran en medio de unos filamentos cósmicos parecidos a una telaraña, detrás de los cuales aparece un agujero negro que tiene una masa mil millones de veces superior a la del Sol, según publicó Télam.
1/ With the help of our Very Large Telescope #VLT, astronomers have found six galaxies trapped in the web of a supermassive black hole when the Universe was less than a billion years old.https://t.co/bArJngYQKO
— ESO (@ESO) October 1, 2020
Credit: @ESO /L. Calçada pic.twitter.com/a7ZqUYitvO
"Antes, creíamos que eran pequeños y que crecían con el tiempo, a lo largo de 13.000 millones de años. Pero el hecho de haber hallado este agujero de este gran tamaño, tan temprano en la historia del Universo, muestra que evolucionaron mucho más rápidamente", explicó a la AFP la astrofísica Françoise Combes, del laboratorio Lerma, del Observatorio de París-PSL.
Respecto a la pregunta que surge sobre cómo es posible un crecimiento tan rápido, el estudio propone la hipótesis que dice que el inmenso entramado de filamentos y las galaxias que se agrupan en él, contienen suficientemente gas para suministrar el "carburante" necesario.
De esta forma, el agujero negro devoraría el gas de los filamentos de la galaxia principal en la que se aloja, y se transforma en un gigante cósmico de forma acelerada.
"En los orígenes del Universo, había mucho más gas y una mayor densidad que ahora", explicó Combes, quien aclaró que con su expansión, el gas se separó y los filamentos se diluyeron.