Temporal en Rosario: destrozos en el mercado retro, la terminal, el aeropuerto y el Gigante de Arroyito

Por el partido del Mundial, por el calor extremo seguido de la tormenta y por los cortes de luz y agua, Rosario vivió este viernes un día extremo que incluyó anegamientos varios y problemas en distintos puntos de la ciudad. Desde Defensa Civil informaron que desde la madrugada trabajan en responder a los más de 350 reportes de vecinos por árboles y columnas caídas y también por chapas y carteles que se volaron.  

Es que las ráfagas superaron los 100 kilómetros por hora. El registro máximo fue de 104 kilómetros por hora, a las 20.34, desde el noroeste, informaron desde Defensa Civil municipal.

Entre las consecuencias de estas ráfagas intensas, hubo daños en el aeropuerto internacional Islas Malvinas. Primero uno de los aviones que había aterrizado minutos antes fue desplazado unos metros, aunque sin que esto pase a mayores. Pero luego el viento afectó los vidrios del hall principal y esto terminó dañando el techo de la aeroestación.

"La fuerza del viento impactó sobre los vidrios, hizo un vacío e impactó sobre el techo. En 15 o 20 días vamos a tener los insumos para reparar lo dañado”, sostuvo en El mejor día de la semana (Radio 2), el director del aeropuerto, Eduardo Romagnoli.

Pese a los daños, el funcionario provincial aseguró que el funcionamiento del aeropuerto es normal y sin complicaciones.

Algo similar ocurrió en la terminal de ómnibus Mariano Moreno. El viento hizo que se precipitara de altura uno de los grandes ventanales que tiene el edificio. Afortunadamente al momento de la caída no había personas debajo por lo que no hubo que lamentar más que algunas cortaduras menores que sufrió una joven que trabaja en uno de los bares del lugar.

"Gracias a Dios no fue nada grave. Cuando cayó el vidrio, explotó. Abajo había personas sentadas y cuando se escuchó el ruido vieron que se estaba quebrando y entonces mi compañera los fue a sacar y ahí es que le quedaron algunos vidrios pegados en el cuerpo, pero se los pudo sacar en la salita", relató al móvil de Radio 2 una de las encargadas del comercio.

Según pudo averiguar Rosario3, el vidrio que se desplomó es el que se ubicaba en el ingreso a la terminal por calle Castellanos. "Se hizo la limpieza correspondiente y ahora esperamos poder reponerlos el lunes. Hay que encargarlos, cortarlos y fijarlos allá arriba. Pero por suerte está todo encausado y bien", señaló el titular de la estación de colectivos, Héctor Peiró.

Destrozos en el mercado retro

Una de las zonas que más complicaciones sufrió producto del temporal fue la tradicional feria de objetos antiguos que funciona en Rivadavia entre Oroño y Santiago. Allí el viento afectó buena parte de la estructura fija que utilizan los feriantes para poner sus productos. Hubo lonas que incluso volaron y quedaron enredadas entre los árboles.

De acuerdo al reporte que realizó desde el lugar el móvil de El Tres, desde muy temprano en la mañana hay personas trabajando en el lugar para intentar poner en condiciones los espacios para que el mercado pueda abrir. Pero de los 70 puestos que sueñe haber, unos 40 habían sufrido daños severos.

A eso se le sumó también el daño que el viento generó sobre el mobiliario público con muchas de las farolas que había sobre el parque destruídas.

Daños en el Gigante de Arroyito y el Caribe Canalla

La fuerza del temporal también causó problemas en el predio del estadio de Rosario Central, las instalaciones del Caribe Canalla y la pileta olímpica que está al pie de la doble platea que da espaldas al río Paraná.

"Desde la noche del viernes, se está trabajando sobre los daños que ocasionó la tormenta tanto en Estadio, como en las instalaciones del Caribe Canalla y Pileta olímpica para que socios y socias puedan disfrutar del día sin problemas", informaron este sábado desde el club a través de sus redes sociales oficiales.

En las imágenes se observan algunos enormes árboles caídos contra las paredes del Gigante, portones, barandas y rejas desprendidas por el intenso viento del viernes a la noche.