El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, aseguró hoy que el programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) “se irá adaptando a medida que vuelva la actividad” e indicó que este benefició alcanza a un total de 2.400.000 trabajadores.
“Hoy el Presidente (Alberto Fernández) va a anunciar la versión cuatro del plan de Asistencia para el Trabajo y la Producción, que es el programa de transferencia a trabajadores más grande de la historia argentina”, aseguró Moroni a El Destape Radio.
Tras indicar que beneficia a 2,4 millones de trabajadores, Moroni afirmó que “hay algunos cambios en el programa pero la filosofía se mantiene", y anticipó que lo que harán desde el Gobierno es "ir adaptando el programa a medida que vuelva la actividad”.
Al ser consultado sobre la estimación oficial de cuántos puestos de trabajo se perdieron durante la pandemia, Moroni calculó que “hay unos 200.000 puestos de trabajo menos pero, a diferencia de lo que ocurrió en el mundo, las medidas de protección del empleo fueron eficaces”.
“El problema hoy es que la creación de empleo es cero y la renovación de contratos temporales es cero, pero, si bien hay despidos, estamos teniendo un número cercano o menos bajas por despidos que años anteriores”, precisó el titular de la cartera laboral.
Al opinar sobre cómo impactarán estos números en el índice de desempleo, Moroni dijo que estimaban una suba “de algún par de puntos”, y argumentó que “siendo la crisis económica más importante de la historia argentina es imposible que el índice no suba”.
Ante una pregunta respecto de si el Gobierno impulsará una reforma laboral, subrayó: “La reforma laboral, con la carga que tiene este concepto, no está en nuestro diccionario”.
Sin embargo, sí consideró que es necesario “dar discusiones dentro de los convenios colectivos, algunos de los cuales quedaron viejos, pero siempre dentro del esquema de paritarias”.
En relación a si seguirán vigentes los acuerdos firmados entre la CGT y la Unión Industrial Argentina para reducir salarios de trabajadores suspendidos, Moroni indicó que “la Ley de Contrato de Trabajo preveía que, en caso de fuerza mayor, se podía suspender a los trabajadores sin pago de salarios”.
“Nosotros lo que hicimos -explicó- es habilitar que se negociara una suspensión y la CGT le puso un piso que fue el 75%. Es un convenio útil porque pone un piso de garantía que incluso es mayor a lo que está sucediendo en otros países”.
Sobre el conflicto entre el sindicato de Camioneros y la empresa Mercado Libre, donde hay una disputa por encuadre gremial de los trabajadores, Moroni dijo que, “en el caso del sindicato de carga y descarga, hay presentaciones hechas en sede judicial”.
Asimismo, aclaró que “hay muchos sindicatos que tienen una simple inscripción y no tienen personería gremial”, y aseveró que “las posibilidades de restringir desde el Poder Ejecutivo la simple inscripción de un sindicato son muy bajas”.
Moroni también manifestó que está a la firma del Ejecutivo el proyecto de DNU que prorroga por dos meses, hasta el 30 de septiembre próximo, la prohibición de efectuar despidos de trabajadores sin justa causa, en el marco de la pandemia de coronavirus.
“Nosotros creemos que la decisión de prohibición de despidos por un lado y un Estado que ayuda al pago de salarios es un esquema que funcionó”, concluyó.