En su oración de este vienes, el papa Francisco pidió por la paz en Medio Oriente y por la reconciliación de los "cegados por el poder y el odio".
En la Basílica de San Pedro y acompañado por cardenales, obispos y representantes de otros credos, el sumo pontífice contextualizó su oración "en estos tiempos azotados por los conflictos y devastados por las armas", y señaló que es un momento en que "la familia humana ha extraviado el camino de la paz".
"Intercede por nuestro mundo en peligro y en confusión. Enséñanos a acoger y a cuidar la vida, ¡toda vida humana!, y a repudiar la locura de la guerra, que siembra muerte y elimina el futuro", pidió a la Virgen durante el acto convocado luego del inicio de una nueva espiral de violencia entre Israel y el grupo islamista palestino Hamas tras los ataques del 7 de octubre.
"Mueve los corazones de quienes están atrapados por el odio, convierte a quienes alimentan y fomentan conflictos", agregó. "Enjuga las lágrimas de los niños, asiste a los que están solos y son ancianos, sostiene a los heridos y a los enfermos, protege a quienes tuvieron que dejar su tierra y sus seres queridos, consuela a los desanimados, reaviva la esperanza", anheló Francisco al tomar la palabra durante la jornada de "oración y ayuno".
En su intervención, pidió a la Virgen por la reconciliación de sus "hijos, seducidos por el mal, cegados por el poder y el odio".
"Tú, que estás cerca de cada uno, acorta nuestras brechas de separación. Tú, que tienes compasión de todos, enséñanos a hacernos cargo de los demás. Tú, que revelas la ternura del Señor, haznos testigos de su consolación. Tú, reina de la paz, derrama en los corazones la armonía de Dios", finalizó.
El rezo de este viernes recordó a la jornada de oración que Francisco encabezó el 7 de septiembre de 2013 para la paz "en la querida nación de Siria, en Medio Oriente, y ¡en el mundo entero!".