El papa Francisco consideró este domingo "un signo de esperanza y un regalo para toda la sociedad" el retorno gradual de las misas en varios lugares del mundo en medio de la pandemia de coronavirus. En Argentina sólo están permitidos los rezos individuales.
Al recitar la oración dominical del Regina Caeli en directo vía streaming desde el Vaticano, el Papa celebró que en algunos países del mundo se haya rehabilitado la celebración de misas, que en otros "se está evaluando la posibilidad" y que en Italia se retomen desde este lunes las celebraciones.
"Pero por favor, vayamos adelante con las normas que nos dan para cuidar la salud de cada uno", pidió Francisco, en referencia a las medidas que obligan al uso de barbijos en las misas y la capacidad máxima de 200 personas en las celebraciones en espacios cerrados.
"Comparto la alegría de las comunidades que pueden finalmente encontrarse como asamblea litúrgica, es un signo de esperanza y un regalo para toda la sociedad", agregó.
En tanto, durante la misa que encabezó en su capilla de Casa Santa Marta, el pontífice destacó el "trabajo necesario" del personal de limpieza durante la pandemia.
"Hoy nuestra oración es por las muchas personas que limpian los hospitales, las calles, que vacían los tachos de basura, que van por las casas para llevarse la basura", dijo.
Jorge Bergoglio destacó así la labor del personal de limpieza como "un trabajo que nadie ve, pero es un trabajo que es necesario para sobrevivir".
Este lunes, el Papa recordará desde las 7 de Roma (2 de Argentina) los 100 años del nacimiento de Juan Pablo II, Papa entre 1978 y 2005, con una misa desde la tumba del pontífice polaco en la Basílica de San Pedro.