La línea Q volverá a funcionar a partir del próximo lunes 8 de mayo. Después de los problemas técnicos que obligaron al municipio a levantar el servicio, ahora las unidades retomarán el recorrido habitual conectando las zonas sudoeste, oeste y centro de la ciudad con el área universitaria.

El problema se había originado con las altas temperaturas que se empezaron a registrar en la ciudad a partir del mes de noviembre. El calor extremo, por encima de los 35º, generaba un sobrecalentamiento de las baterías con las que los trolebuses rusos realizaba la parte autónoma del recorrido. Esto activaba un bloqueo de seguridad en el sistema y las unidades no podían circular a más de 10 km/h.

Pese a los intentos por mejorar la refrigeración de las baterías y ante la falta de servicio técnico oficial por el quiebre de la empresa rusa Trolza, finalmente el 23 de enero el municipio oficializó que se iba a discontinuar el servicio. El anuncio aclaraba que la medida era temporal hasta que se encuentre una solución de fondo o hasta que baje la temperatura.

Lo primero no pasó, el Ejecutivo no pudo dar con especialistas que puedan garantizar el normal funcionamiento de los equipos rusos ante temperaturas extremas y tampoco se consiguieron sistemas alternativos que garanticen la autonomía necesaria para cumplir con el recorrido. 

Ante esto es que se decidió esperar a qu. pase el verano y se termine la ola de calor agobiante. Ya con el otoño avanzado, y con una baja considerable de la temperatura, desde el área de Movilidad comenzaron la semana pasada a poner en condiciones las unidades que en este tiempo estuvieron cubriendo el servicio que actualmente hace la línea K.

A partir del próximo lunes, la Q volverá a hacer su recorrido habitual conectando 14 barrios de la ciudad: Plata, Santa Teresita, Acindar, Centro, Parque, República de la Sexta, Martin, Lourdes, Parque Casado, San Francisquito, Bella Vista, Alvear, Santa Teresita y Ex Fábrica Militar Domingo Matheu.

El trayecto comienza en la Colectora Juan Pablo II y Francia y va por Francia hasta Mendoza, de ahí a Alem para luego doblar por Cerrito, Beruti y terminar en Riobamba. En tanto que el regreso es desde el Centro Universitario de Rosario (CUR) por Riobamba hasta Necochea, de ahí por 3 de Febrero a 1º de Mayo, San Juan, Francia. Arijón y Lagos para llegar nuevamente a la punta de línea en Colectora Juan Pablo II y Francia.

La normalización de la línea Q de trolebuses apunta a beneficiar a una importante cantidad de vecinos y estudiantes universitarios de la zona sudoeste que en este tiempo vieron afectada la conectividad con el centro y la Siberia.

Cabe destacar que, al no haberse encontrado una solución al problema de las baterías, desde el Ejecutivo municipal confirmaron que el servicio permanecerá activo hasta que el clima lo permita. Es decir, cuando el calor se haga nuevamente una constante y haya días consecutivos por encima de los 35ºC, volverá a suspenderse.

La suspensión de la línea Q generó en su momento una disputa entre la actual gestión de Movilidad y la anterior. Pese a pertenecer al mismo frente político y a que muchos de los funcionarios que actualmente están en esa secretaría también formaron parte de la comitiva que viajó a Rusia para definir la compra de los trolebuses en 2017, hubo acusaciones cruzadas sobre la adquisición. 

Lo concreto es que las unidades presentaron fallas a los pocos meses de que llegaron a Rosario y se pusieron en funcionamiento. En ese momento la firma Trolza envió técnicos que realizaron una serie de intervenciones para intentar solucionar los inconvenientes. Pero los problemas persistieron y el municipio nunca ejecutó la garantía.

Entre las explicaciones que se dieron en su momento, los funcionarios alegaron que la fábrica de trolebuses comenzó un proceso de crisis que terminó en la quiebra y que, cuando quisieron avanzar en un juicio internacional, el costo del mismo les pareció excesivo.