Este miércoles se realizará una nueva subasta de bienes decomisados al delito en Santa Fe. Desde la Provincia aseguran que será “la más grande de la historia” desde la creación de la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad), ya que se van a ofrecer 41 vehículos, 3 lotes de joyas, 1 lancha y 2 propiedades.

Con respecto a los dos inmuebles, uno está ubicado en Funes y el otro en Roldán. Ambas casas tienen un precio base de 25 millones de pesos y ya se habían puesto en subasta, pero no tuvieron oferentes. El principal motivo es el miedo que le genera a muchas personas ocupar la propiedad que estuvo vinculada a alguna organización narcocriminal.

Consultado al respecto, el secretario de Gestión de Registros Provinciales, Matías Figueroa, aseguró que “no tienen peligrosidad”. “En la agencia tenemos diferentes niveles de peligrosidad, las propiedades que estamos subastando es porque vemos que, después de tanto tiempo que la tuvimos en posesión, ya no hay riesgo para poder hacerlo y entonces se subastan”, afirmó en Radiópolis (Radio 2).

“En cambio otras propiedades que decomisamos de las bandas, tanto de Los Monos como del clan Alvarado son propiedades a las que estamos dándole diferentes utilidades. Entonces esas propiedades que no se podrían subastar por la peligrosidad que vemos y entonces las destinamos a ministerios o instituciones”, agregó.

Con respecto al origen de los bienes que se subastan, Figueroa también aclaró que no todos son decomisados al narcotráfico, sino que también a otras organizaciones delictivas. “Por ejemplo hay bienes de quienes hacen el cuento del tío, estafas virtuales o todo tipo de delitos”, sostuvo el funcionario.

En muchos de esos casos, parte del dinero que se junta en la subasta se utiliza para indemnizar a las víctimas de las estafas. “Se coordina con los fiscales que nos tienen que decir en qué porcentaje fue afectada cada víctima. Pero eso es lo bueno de la agencia, que en vez de que los vehículos se deprecien o queden desguazados, los transformamos en dinero que se puede devolver a las víctimas”, insistió.