El sistema de higiene urbana de Rosario lleva un año funcionando con el pliego que regula la actividad vencido. En junio del 2022, los contratos con las empresas privadas que explotan el servicio se terminaron y el Concejo tuvo que votar una prórroga excepcional de 24 meses, por fuera de lo que estaba estipulado en el pliego.
En simultáneo con el pedido de prórroga, el Ejecutivo envió su mensaje con el nuevo sistema de recolección de residuos. Si bien el objetivo era que entre junio y diciembre del 2022 los concejales discutan en comisiones el nuevo pliego y hagan sus aportes, el tiempo pasó y el proyecto quedó estancado en Servicios Públicos.
Según pudo averiguar Rosario3, ya habría un principio de acuerdo entre los concejales, pero todavía falta el visto bueno del Ejecutivo para aplicar algunas modificaciones propuestas. Además los ediles esperan que el municipio envíe también una actualización del valor del contrato teniendo en cuenta que, desde su presentación a la fecha, la inflación superó el 100%.
A esto se le suma también la situación de la ley de Basura Cero que la secretaría de Ambiente y Espacio Público envió en 2020 al Concejo y nunca se trató. “Vamos a tener que rever todas las metas”, confirmó a este medio el titular de esa cartera, Nicolás Mijich durante la presentación de una serie de acciones para combatir el cambio climático.
Lo concreto es que, pese a no estar declarada, el sistema funciona actualmente en una situación similar a la de una emergencia donde el Ejecutivo y las empresas van negociando de forma particular el sistema de recolección sin tener un marco legal vigente ya que los contratos están vencidos.
Estos nuevos acuerdos entre el municipio y las empresas parten del principio de buena fe, y de que ambas firmas tienen intenciones de volver a presentarse en el próximo pliego para seguir explotando el servicio. Pero lo concreto es que los privados corren con ventaja a la hora de negociar ya que en cualquier momento podrían retirarse del mercado sin recibir sanciones (porque el pliego y sus prórrogas establecidas ya vencieron) y generando un problema todavía mayor.
Pese al panorama, tanto desde el Ejecutivo como en parte de la oposición hay optimismo de que el nuevo pliego se destrabe en las próximas semanas y antes de fines de julio se apruebe. Resta saber si los equipos técnicos del municipio logran iniciar el proceso licitatorio y su posterior adjudicación antes de agosto del 2024, cuando vence la prórroga extraordinaria.
