Newell's tuvo una noche negra en su vuelta al Coloso y perdió ante Godoy Cruz. La derrota generó cierto malestar e insultos del público y Gabriel Heinze asumió la responsabilidad del caso: "Percibí que los silbidos eran para mí y me parece muy bien".
Y agregó: "Cuando perdés, ahí está la reacción de la gente. Ahora hay que aguantar y seguir luchando. No debemos dejar de trabajar. Queremos que estos silbidos se transformen en aplausos. No creo que sean para los jugadores, ellos hacen lo que pueden".
En el mismo sentido, sumó: "Tenemos que reaccionar rápido y hacer lo mejor en el próximo partido".
Respecto del respaldo de sus futbolistas, indicó: "Creo que cuando sienta que no me responden, que no tengo comunicación, el entrenador se tendrá que ir. Yo siento que cuando hablo me escuchan".
Respecto del trámite del partido y los merecimientos de cada uno, analizó: "Hemos tenido varias situaciones. La diferencia con ellos fueron las terminaciones, la toma de decisiones. No pudimos dar ese pase necesario, esa habilitación".
Luego, agregó: "Sabíamos que iba a ser un partido dinámico. Apostábamos a poder golpear en ese ida y vuelta, o al salir de esa presión que ellos hacían".
Luego, concluyó: "Veníamos de dos victorias y ahora hay que levantar a todos los chicos".