Desde que se confirmó a Kily González como entrenador de Rosario Central comenzaron a generarse muchas ilusiones en el pueblo canalla. Entre ellas se encolumnaron una serie de regresos.
Se habló de Ángel Di María, de Milton Caraglio y también de Ezequiel Lavezzi. Pocho había dejado el fútbol, pero su ilusión de hincha le reavivó las esperanzas que hoy por hoy, están caídas. Es que para estar al 100% debía realizarse una intervención quirúrjica en sus meniscos.
Este sábado, Fernando Carrafiello contó que el oriundo de Villa Gobernador Gálvez visitó a un médico en España y ante su consulta, la respuesta fue negativa. "Pocho así no podés volver al fútbol. Así no podés jugar. No te recomiendo la operación", citó el periodista en Esto Se Baila Así (Radio Dos).
Al margen de sus intenciones, la realidad física le terminó dando una respuesta que no esperaba y que lo aleja definitivamente de las canchas. Las últimas imágenes del Pocho lo muestran vacacionando en diferentes sitios paradisíacos, lejos de aquellas que lo pusieron en el primer plano del fútbol europeo y como un hombre valioso para el seleccionado nacional.
Su vínculo con Rosario Central quedará sellado solo desde lo afectivo ya que siempre sigue de cerca al equipo del Kily. El último lunes en el debut de la Copa de la Liga Profesional ante Godoy Cruz, incluso hizo un posteo saludando a su hijo Tomás, que fue uno de los alcanzapelotas en el Gigante.
