Una familia rosarina tomó la drástica decisión de mudarse de la casa de Biedma al 4000 en la que vivieron los últimos cuatro años producto de amenazas anónimas que empezaron a recibir desde febrero. Según contaron, las intimidaciones eran para que paguen 50 mil pesos o abandonen la propiedad, que es lo que finalmente hicieron.
“Primero fueron cartas intimidatorias, hice las denuncias pertinentes pero ayer fui a fiscalía y de las dos denuncias entró una sola”, contó Leandro en De 12 a 14 (El Tres). Con respecto al contenido de las amenazas, el hombre detalló que en la primera les deban cinco días para irse del lugar o pagar 50 mil pesos para poder quedarse.
Por esta intimidación formalizaron la denuncia ante la Justicia y desestimaron la advertencia. Al poco tiempo recibieron un nuevo mensaje bajo su puerta donde les pedían que se comuniquen a un número de teléfono para arreglar y remarcaban que “no batan la cana”, haciendo referencia a que no hagan la denuncia.
Nuevamente Leandro informó a la Justicia lo que estaba ocurriendo y se comprometieron a incluir su domicilio dentro de las rondas policiales. Pese a esta promesa, el domingo por la noche se preparaban para cenar cuando escucharon al menos dos detonaciones. Al salir se encontraron con que habían pasado y disparado contra la puerta de acceso.
“Las balas traspasaron todas las puertas que está en el pasillo, uno de los balazos quedó en la puerta de la la sala donde juegan los chicos. “Tengo una hija con asma crónica y otra de 4 años con microcefalia. Tienen prohibido acercarse a la puerta o jugar en la vereda”, detalló.
Tras los disparos, la familia decidió abandonar la propiedad y mudarse a otro domicilio. “Por la seguridad de mis hijos, me voy. Soy una persona que sale a laburar todos los días, cumplo con todo, pago impuestos. Pero no se puede vivir más así”, lamentó Leandro.
“Estamos preparando las cosas para irnos. Rosario es así, no hay apoyo ni del gobernador ni del intendente para quienes trabajan día a día. Yo trabajo de albañil, es empezar de vuelta en otro lugar”, concluyó.