Una hija del fallecido barra brava de Rosario Central Julio “Tito” o “Cara de Goma” Navarro quedó involucrada en una cadena de encubrimientos surgida tras el doble crimen de Andrés “Pillín” Bracamonte y su ladero Daniel “Rana” Attardo.
Según la Fiscalía, Leila Navarro, de 34 años, recibió el celular de Attardo de manos de Martín “Pitito” Martínez y su primo, quienes se lo apropiaron junto a otros elementos personales en el Hospital Centenario, adonde los dos barras llegaron muertos en la noche del 9 de noviembre.
Como se escuchó en las audiencias en las que fueron imputados “Pitito” y su primo Marcelo Martínez, se especula que el celular de Attardo contenía información relevante para encaminar la investigación del doble crimen de los jefes de Los Guerreros.
La Fiscalía sostiene que a través de ese teléfono llegó la llamada que convocó a “Pillín” y a “Rana” a la esquina de Avellaneda y Reconquista, donde fueron acribillados en medio de la oscuridad causada por un sospechoso corte de luz.
El teléfono Xiaomi Redmi Note S9 de Attardo sigue sin aparecer. En la jornada del jueves en Centro de Justicia Penal, Leila Navarro aseguró que esa noche recibió de los Martínez la riñonera de “Rana”, pero no el teléfono. La fiscalía no le creyó.
Durante un allanamiento en su casa de barrio La Florida Oeste, realizado el martes pasado, el personal de PDI halló varias pertenencias de Attardo: credenciales, una cadenita, lentes, una entrada para el Gigante de Arroyito, cables USB y una funda de celular manchada con sangre.
La fiscal Georgina Pairola le reprochó a Navarro por haber faltado a la verdad en su declaración del 15 de noviembre, cuando fue consultada sobre el paradero del celular de Attardo y la riñonera marca Adidas. Solo proporcionó el número de teléfono de Attardo, omitiendo mencionar que había recibido los objetos de “Pitito”.
Tras escuchar a las partes, el juez Florentino Malaponte resolvió dictar prisión preventiva en modalidad domiciliaria para Navarro, por delitos de encubrimiento de hurto calamitoso y agravado por la gravedad del delito precedente, además de falso testimonio. La mujer, quien fue madre hace 13 días, se encuentra en pleno puerperio.