Dos de los cuatro acusados de participar del asesinato del ex concejal Eduardo Trasante continuarán detenidos por un año más al confirmarse este martes una prórroga de la prisión preventiva extraordinaria.
El fiscal Gastón Ávila solicitó durante una audiencia de revisión de medida cautelar la extensión de prisión preventiva de Alejo Leiva y Facundo “Pakuno” López, imputados desde octubre de 2020 como partícipes necesarios del asesinato de Trasante.
A pesar de la oposición de las defensas, el juez Hernán Postma convalidó el planteo de la fiscalía y ambos continuarán detenidos por el plazo de un año, informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Trasante fue asesinado la tarde del 14 de julio de 2020 en la vivienda que compartía con su pareja, ubicada en calle San Nicolás al 3600, en el barrio Alvear de la zona sudoeste.
Según la investigación, dos personas armadas que se movilizaban en un Peugeot 308 blanco, el cual había sido robado cuatro días antes, golpearon a la puerta de la casa y dijeron ir de parte de una hija de la víctima.
Cuando la esposa de Trasante les abrió, la retuvieron y la obligaron a que lo llamara, según detalló la investigación de los fiscales Ávila y Matías Edery.
El ex concejal de Ciudad Futura, conocido públicamente por su lucha tras el asesinato de uno de sus hijos en el triple crimen de militantes sociales del Año Nuevo de 2012 en Rosario, bajó de la planta alta y recibió un disparo en la mano y luego otro, desde más cerca, en la cabeza.
En octubre de 2020, los fiscales imputaron a cuatro personas por su presunta participación en la organización del asesinato, aunque hasta ahora se desconocen quiénes fueron los autores materiales e intelectuales.
De acuerdo con la investigación, el piloto peruano Julio Andrés Rodríguez Granthon, luego condenado por narcotráfico pero que ya entonces estaba detenido, dio las directivas para comprar el auto robado que se utilizó en el crimen.
"Para ello, desde su lugar de detención en el pabellón 9 de la Unidad 11 de Piñero, dispuso de su organización criminal con la finalidad de conseguir el automóvil", dijeron Edery y Ávila.
Los ejecutores de esa orden fueron Leiva y López, mientras que un cuarto imputado, Brian "Buba" Álvarez, compró por 20 mil pesos el Peugeot 308 blanco robado el 10 de julio, a sabiendas del uso que se le iba a dar.
La investigación determinó que el automóvil fue "descartado" por López el mismo día del crimen en calle Barcalá y Uriburu, a 400 metros del su domicilio.
En tanto, la revisión de la prisión preventiva de Álvarez se realizo en julio pasado, informó a la agencia Télam la abogada querellante por la familia de Trasante, Gabriela Durruty, y explicó que en relación Rodríguez Granthon se realizará el próximo viernes.
En el derrotero de la causa, el fiscal Gastón Ávila sostuvo que no encontró "una sola evidencia" de que el asesinato haya sido por motivaciones políticas, por las tareas llevadas adelante en el Concejo Trasante. También descartó que el homicidio haya tenido relación con su actividad pastoral en las cárceles.