Ayer fue un día especial para el Concejo Municipal de Rosario, por el cruce del río que protagonizaron los ediles, para sesionar sobre la quema de pastizales la escuela Marcos Sastre de El Espinillo. Sin embargo, la presidenta de ese cuerpo, María Eugenia Schmuck, reconoció que se quedó con algún sabor amargo por algunos comentarios sobre la “excursión”.
“La verdad que sí, me duele muchísimo que digan que los concejales fuimos a vender humo a la isla”, admitió Schmuck en contacto con el programa Radiópolis (Radio 2).
Luego amplió: “Nosotros vivimos una situación inédita, que el Congreso de la Nación nos invite a debatir sobre este tema. Y la verdad que poner el ojo en qué comieron los concejales, cuánto nos salió cruzar a la isla. Pusimos todo de nuestro bolsillo porque el Concejo no tiene un peso”.
Después se quejó: “Todo lo que hicimos hasta acá, parece que no existió”.
Schmuck apuntó que “fueron tres minutos de cruce, fuimos a una escuela donde todos estaban felices por la visita y porque fuimos a tratar el tema ahí”.
Más allá de esta cuestión, la presidenta del Concejo rosarino confió: “Yo le aclaré a la presidenta del Concejo de Victoria que no íbamos a ir a territorio entrerriano, que íbamos a hacer la sesión en la parte santafesina de la isla”.
“Nos hubiese encantado hacer una sesión conjunta con el Concejo de Victoria, pero no se puede en esta época de pandemia. No queremos un conflicto de jurisdicciones; es más, creemos que ellos son tan víctimas como nosotros”, relató.
Sobre los incendios, luego de experimentar en el terreno, opinó: “Ninguna de las hipótesis que se manejan sobre la responsabilidad de las quemas me convence. Después de ver la isla, no sé qué emprendimiento puede florecer en esa tierra arrasada”.
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