El argentino Guillermo Söhnlein (57), fue uno de los cofundadores de la empresa OceanGate, la firma dueña del sumergible que implosionó en una excursión al Titanic. Siguió las tareas de búsqueda desde España, y sostuvo que el protocolo de la empresa siempre fue que "el piloto saque el submarino a la superficie".
Hace 10 años dejó de trabajar en la empresa y ahora está radicado en Barcelona, España. El argentino creó OceanGate en 2009 y en 2013 abandonó su posición, según describe en su perfil de LinkedIn.
En es misma red social, se describe como "consultor independiente y emprendedor social, centrado en la innovación tecnológica, los negocios internacionales y la exploración y asentamiento sostenible de entornos extremos en tierra, mar y espacio".
Luego de difundirse la noticia del hallazgo del Titán, Söhnlein dialogó con la cadena de noticias BBC y contó que el protocolo de la empresa "es que el piloto saque el submarino a la superficie. Siempre he pensado que eso es lo que Stockton habría hecho". Stockton Rush fue el cofundador de OceanGate con el argentino.
Al mismo medio, días atrás también le advirtió sobre su temor de que "cuando se opera a gran profundidad, la presión es tan grande que si hubiera una falla se produciría una implosión instantánea. Si eso es lo que ocurrió, habría ocurrido hace cuatro días".