Las misiones Apolo dejaron una huella indeleble en la historia de la exploración espacial, y las banderas que los astronautas plantaron en la superficie lunar son un símbolo duradero de aquellos logros. Aunque permanecieron en pie cuando las tripulaciones despegaron de la Luna, es probable que hayan sufrido daños debido a las condiciones extremas en la superficie lunar.
Según Matthew Ward, profesor de Historia en la Universidad de Dundee, la bandera estadounidense tiene un poder distintivo y simbólico que la convierte en un elemento clave de la identidad nacional. "Es difícil pensar en otra bandera que tenga tanto significado", señaló Ward, según publicó el sitio especializado Space.com.
El izamiento de la bandera del Apolo 11 en la Luna fue un acto estrictamente simbólico, según Anne Platoff, autora de un informe sobre la colocación de la bandera en la Luna. Aunque Estados Unidos renunció a cualquier derecho territorial sobre la Luna mediante el Tratado de las Naciones Unidas sobre el Espacio Ultraterrestre, el evento generó debates nacionales e internacionales.
En la actualidad, el estado de las banderas sigue siendo un misterio. Aunque es probable que hayan sufrido daños debido a las condiciones extremas en la superficie lunar, su legado como símbolo de la exploración espacial y la identidad nacional sigue vivo.