La ampliación de la planta potabilizadora en Santa Fe capital se encuentra paralizada y sin mano de obra. Debido a los “precios elevadísimos” de los insumos, la Unión Transitoria de Empresas (UTE) a cargo de las obras despidió a 27 trabajadores y mantienen sólo a diez en tareas mínimas.

Según informó desde la capital provincial la periodista Ivana Fux de Radio 2, la UTE conformada por Obring, Supercemento y Basaa, que lleva adelante la ampliación de la planta potabilizadora de Aguas Santatesinas S.A. desvinculó este martes a 27 empleados. En un escrito, invocaron “desabastecimiento y precios elevadísimos” de insumos, atraso en el pago e “incertidumbre” sobre la continuidad de fondos nacionales ante la postura de “obra pública cero” del presidente Javier Milei ya desde su primer día como jefe de Estado, y antes incluso como candidato.

A este panorama, se suma otro bemol: la acefalía del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento, responsable de proyectar y ejecutar las obras de saneamiento cloacal y de agua potable en todo el territorio nacional, que en esta situación podría servir como puente entre las empresas y el gobierno central.