El gobierno de Santa Fe destacó que en lo que va del año ya llevan incautadas 400 toneladas de cobre y otros metales de dudosa procedencia. Los secuestros se hicieron en 35 operativos, 15 de ellos en Rosario. También remarcaron que, producto de los controles, hay un descenso de denuncias en el 911 por el robo de cables.

A modo de balance, desde el ministerio de Gobierno e Innovación Pública explicaron que con los operativos de control a chatarrerías, locales de venta de autopartes y desarmaderos se logró prevenir la sustracción de automotores, repuestos y materiales no ferrosos, como cables y placas de bronce o cobre.

“Las cifras marcan que los controles están dando resultados positivos, y que se están logrando desarticular los distintos eslabones de la cadena delictiva que implica estos ilícitos, que causan daño a la población y al medio ambiente. También disminuyó la cantidad de llamados a la línea 911, con respecto a este tipo de delitos”, remarcaron desde el ministerio.
 
Como resultado de estas inspecciones, se incautaron 400 toneladas de material. De ese total, están en proceso de compactación 300 toneladas en Venado Tuerto, producto de un predio completo del cual la justicia ordenó que la provincia tome posesión de ese material que no se podía corroborar su procedencia.

En estos meses se realizaron 35 inspecciones, allanamientos y clausuras en la provincia. Del total de esos procedimientos, 15 se hicieron en Rosario. Por otra parte, comercios vinculados a ese rubro han empezado a acercarse al registro de Desarmaderos para regularizar su situación.

“Los resultados obtenidos demuestran que estas acciones permiten controlar no sólo la venta ilegal, sino también buscar la trazabilidad de los elementos. Las cifras señalan, asimismo, el buen funcionamiento de los mecanismos de denuncias que ofrece la provincia a la población”, explicaron desde la provincia.

Sobre el trabajo realizado, el secretario de Gestión de Registros, Matías Figueroa Escauriza expresó: “Comenzamos con este trabajo por un pedido del gobernador Pullaro y el ministro Bastia de perseguir este tipo de robo hormiga. Estamos controlando a quienes reducen lo robado, estamos en ese eslabón de la cadena”.

“En los distintos allanamientos hemos encontrado placas de cementerio, material de la EPE, de Aguas, de empresas de telefonía, etc. Este tipo de robos son pequeños, pero afecta a la ciudadanía muchas veces dejándola durante horas, o días sin algún tipo de servicio”, puntualizó el funcionario.

Descenso de denuncias al 911

De acuerdo a los datos difundidos por el gobierno de Santa Fe, en los últimos meses se viene registrando un descenso de llamados para denunciar este tipo de delitos a la central de emergencias. En febrero, hubo 926 llamadas denunciando robos de cables y algún tipo de metal. Luego de los allanamientos y controles que se llevaron adelante, en abril se recibieron 387 llamadas al 911, lo que implica que el robo y las denuncias disminuyeron un 58,2 %. 

En Rosario, entre febrero y abril se registraron 10.309 llamadas relacionadas directamente con hurtos o tentativas. De esas llamadas, 2.003 se referían a la sustracción de cables y otros elementos de metal, lo que representa el 19 por ciento del total de comunicaciones en esa ciudad.

En este sentido, las estadísticas indican que la mayoría de las denuncias apuntan a robos de cables: 1.441 llamados, lo que significa el 72 por ciento del total de elementos, que incluyen dos categorías: cables y metales.