Este lunes el intendente Pablo Javkin hizo el pedido formal al gobernador Omar Perotti para que le pida al gobierno nacional que recategorice a la ciudad de Rosario, identificada como zona de “alarma epidemiológica”. Fue durante una reunión de más de dos horas con otros intendentes y hubo acuerdo en avanzar con el trámite. El cambio, permitiría restablecer la presencialidad escolar. Pero para Javkin, mantener las escuelas abiertas, dependerá también del cuidado individual.
“Para cuidar la presencialidad, nos tenemos que cuidar todos”, afirmó el intendente, en la misma línea que la ministra de Educación Adriana Cantero este lunes. “Seguimos contagiándonos en las reuniones privadas”, señaló.
En diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2), Javkin diferenció su reclamo del de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba), que tiene enfrentados (y judicializados) al gobierno porteño y a la administración nacional. No solo por la autonomía de la Capital Federal, sino por “las formas de debate”.
Si bien señaló que la ocupación en terapias intensivas es alta y los contagios van en aumento, advirtió que la situación de Rosario todavía no es de alarma como la de Caba: “De algún modo, acá hay algo injusto, Rosario atiende pacientes de toda la región e incluso de otras provincias. Eso está bien, nos enorgullece, pero un indicador de camas críticas que ignore que atendemos a la región no es correcto”.
“Sinceramente creo que cuando hay canales administrativos hay que usarlos”, opinó y sostuvo: “Tenemos que preservar la presencialidad, es un brazo del Estado que no puede faltar, es el lugar donde muchos de nuestros chicos encuentran la contención que en otros lados no tienen”.