Japón declaró este jueves el estado de emergencia en la capital, Tokio, y en su periferia para intentar frenar el avance del coronavirus tras registrar una cifra récord de contagios en un solo día tanto a nivel nacional como en la zona capitalina.
"Declaramos el estado de emergencia" ya que "se teme que la rápida expansión del nuevo coronavirus en todo el país tenga un importante impacto en la vida de sus habitantes y en la economía", declaró el primer ministro, Yoshihide Suga, en una reunión con expertos.
El estado de emergencia, que afecta a la capital y a tres regiones adyacentes, comenzará a regir el viernes y durará un mes. La región central de Aichi tiene previsto solicitar su adhesión al plan, informó la agencia de noticias AFP.
El Ministerio de Salud informó 6.100 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas, un récord desde el inicio de la pandemia. Tokio también registró su mayor número de infecciones en un día, 2.447, unos 800 más que su anterior récord, dijo el Ministerio.
La zona metropolitana de Tokio, donde viven casi 37 millones de personas, el 30% de la población japonesa, concentra la mayoría de los nuevos casos diarios de coronavirus que se registran a nivel nacional.
Las medidas afectarán principalmente a los restaurantes y bares, que tendrán que dejar de servir alcohol después de las 19 y cerrar sus puertas a las 20.
El Gobierno también pidió a los habitantes que eviten salidas innecesarias por la noche e instó a las empresas a favorecer el teletrabajo, con el objetivo de reducir los desplazamientos en un 70%.
Las escuelas permanecerán abiertas y estarán permitidos los eventos públicos, pero con una capacidad máxima de 5.000 espectadores.
El impacto de la pandemia en Japón fue relativamente menor que en otros países, con unas 3.700 muertes registradas oficialmente y unos 260.000 contagios desde enero de 2020. Pero desde el noviembre, el país vive una tercera ola cada vez más preocupante.