El adolescente de 14 años baleado el viernes pasado cuando le abría el portón de la cochera a su papá para ir a la escuela, continúa internado en la terapia intensiva del hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) con asistencia respiratoria y pronóstico reservado. Sufrió tres tiros, uno de los cuales, en el abdomen, le causó una importante hemorragia y obligó a los médicos a operarlo apenas ingresó al centro de salud.
“Sigue siendo un cuadro delicado, el pronóstico va a depender de cómo responda en las próximas horas o días”, actualizó a Radio 2 el subdirector del Heca Germán Camiletti, el estado de salud del chico herido en Sotomayor al 600.
Camiletti informó que el adolescente se mantiene bajo asistencia respiratoria. El viernes, cuando le abría el portón del garage a su padre para que lo llevara al colegio, seis balazos lo lastimaron en la pierna, el pecho y la panza. “El que más daño hizo a su salud fue el abdominal, que requirió una intervención quirúrgica y fue por el que perdió más sangre”, observó.
El ataque del viernes ocurrió a metros de dos inmuebles sindicados como los domicilios de dos presuntos integrantes de la supuesta banda narco liderada por Francisco Riquelme, por lo que no descartaban que los agresores se hayan confundido de blanco.
