Tras el boom del color nude (que sigue siendo uno de los favoritos por su efecto ilusorio en relación al largo de los dedos) y las milky nails (generando un efecto lifting), llega al primer puesto de las tendencias un nuevo color para las uñas. Se trata del tono "azul bebé", o, en inglés, baby blue, bien reconocido entre las opciones pasteles que invitan a la calma y la serenidad sin dejar de aportar color.
El street style dentro de la Sydney Fashion Week fue en el lugar donde más usado se vio, y los expertos señalan que tal elección responde a algo muy simple: le queda bien a cualquier persona, incluyendo rango de edad, ya que es un color muy versátil. A diferencia de las milky nails, el toque de color rompe con aquella sensación de palidez y sigue resaltando detalles como el bronceado de la piel, pensando en las próximas temporadas.
Cómo combinarlo:
La opción de llevar todas las uñas iguales es una de las grandes alternativas, aunque, poner un toque divertido, sigue siendo lo más elegido. Desde algún detalle mínimo en otro color, como puntitos o líneas en blanco, negro u otro tono de azul en este caso, hasta sumar una o varias uñas de otros colores.
A su vez, en una misma uña, se estila usar un efecto degradé en la punta que vaya aclarando el color hasta llegar al blanco o al no color.