Según el portal espacioliving.com, desde hace algunos años, los vinilos siguen ganando terreno en lo que respecta a decoración. Sus ventajas son claras: son fáciles de colocar, económicos y existe una gran variedad de propuestas para personalizar los ambientes de tu casa. 

A continuación, te brindamos algunos consejos sobre cómo elegirlos, colocarlos y cuidarlos con el paso del tiempo. ¡Tomá nota!

¿Cómo elegirlos?
Antes de comprar alguno de estos adhesivos decorativos, lo primero que tenés que definir es el lugar donde lo vas a colocarlos. Tené en cuenta que el diseño se debe adaptar a tu hogar y no al revés. 

¿Dónde colocarlos?
Hay ideas para cada ambiente: living, comedor, cocina, baño, dormitorios, entre otros. Recordá que los vinilos se pueden aplicar tanto en paredes como en muebles, objetos y vidrios.

Características de las superficies
• Espejos o vidrios: siempre es conveniente limpiarlos con un paño con alcohol. 

• Las paredes deben tener una terminación lisa, fina y estar pintadas con látex de calidad, lo que permite una correcta colocación del material. 

• Cerámica o azulejos: lo recomendable es eliminar todo tipo de suciedad, ya que en la cocina o en el baño, por el vapor, muchas partículas de grasa se adhieren impidiendo una correcta unión.

¿Cómo pegarlos?
Los vinilos tienen tres partes: el protector, el diseño y el papel de transferencia. Lo ideal es doblar las puntas del protector, sin que el bosquejo quede al descubierto y adherir el papel de transferencia a la pared. Ésto te permitirá moverlo de lugar hasta alinearlo correctamente y podés ver cómo quedará la decoración.

Luego, tenés que retirar cuidadosamente el papel blanco del dorso y adherir la figura a la superficie donde querés pegarla, y con la ayuda de una tarjeta de crédito o de tus propios dedos, presioná sobre la lámina que sostiene el modelo. Una vez pegado, retirá esta laminilla, corroborando una adecuada colocación.

¡Ahora sí! Tu vinilo está listo. Animate a decorar toda tu casa.