Un nuevo estudio reveló el hallazgo de un porcentaje inquietante de productos de cacao con metales pesados tóxicos en niveles que superan las directrices de algunos estados de Estados Unidos. Los productos analizados provienen de aquel país, aunque podrían también encontrarse en otras partes del mundo. Se trata de una investigación de la Universidad George Washington (GWU) y los resultados fueron compartidos por Frontiers in Nutrition.
Los investigadores analizaron 72 productos de cacao y chocolate negro, tanto de producción nacional como europea, que pueden encontrarse además en tiendas online como Amazon o físicas como GNC o Whole Food. Por este motivo, pueden encontrarse en distintas partes del mundo.
El estudio
Luego del análisis, que contó con un seguimiento cada dos años durante un período de ocho (2014-2022), detectaron la contaminación con plomo y cadmio, metales pesados que representan un significativo peligro para la salud si se toman en cantidades no permitidas.
El 43% de los productos estudiados superaba los niveles de dosis máxima permitida (MADL) para el plomo de la estricta Proposición 65 del estado de California, que lo establece en 0,5 mcg/día, y el 35% de los alimentos analizados tenía también más cadmio del que se permite (4,1 µ/día). Además, se analizaron los niveles de arsénico, pero ninguno de los productos superaba la dosis máxima (10 µ /día).
Al comparar con los límites establecidos por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), el 97,2% (70 de 72) de los productos con chocolate estaban por debajo de lo marcado para el plomo. Los investigadores señalan que esta doble referencia (estatal y nacional) muestra cómo los distintos marcos normativos pueden influir en la interpretación de los niveles de seguridad de los productos de consumo, y también recuerdan que otros alimentos de la dieta pueden aportar estos elementos tóxicos.
“A todos nos gusta el chocolate, pero es importante consumirlo con moderación, al igual que otros alimentos que contienen metales pesados, como el atún y el arroz integral sin lavar”, afirmaron. Y añadieron: “Aunque no es posible evitar por completo la presencia de metales pesados en los alimentos, hay que tener cuidado con lo que se come y la cantidad que se ingiere”.
Una preocupación mundial
Pese a que el estudio se ha realizado en Estados Unidos, los científicos indicaron que la contaminación por metales pesados en los productos del cacao es una preocupación mundial debido a las prácticas agrícolas similares y a las condiciones medioambientales que afectan al cultivo del cacao.
“Aunque las normativas y los límites aceptables de metales pesados pueden diferir, es probable que en Europa puedan encontrarse niveles similares de contaminación”, afirmaron.
La composición del suelo, el uso de fertilizantes y la contaminación industrial, son algunos de los factores que contribuyen a la presencia de metales pesados en el cacao en grano, que son de relevancia universal. Sin embargo, “las diferencias regionales en las políticas medioambientales y las prácticas agrícolas podrían dar lugar a algunas variaciones en el alcance de la contaminación”.
Cuánto consumir
Para los investigadores, teniendo en cuenta la contaminación por metales pesados, una cantidad segura de cacao diario sería de 28 gramos. "Esta porción ayuda a limitar la exposición a esos metales, al tiempo que permite a los consumidores disfrutar del chocolate negro y de sus posibles beneficios para la salud”, agregaron. Algunos estudios sugieren beneficios para el sistema cardiovascular, el rendimiento cognitivo y la inflamación crónica.
Además, sugirieron diversificar la dieta para evitar una exposición excesiva a los metales pesados procedentes de un solo alimento, como el chocolate, limitar el tamaño de la ración o no consumirla a diario, mirar las etiquetas, elegir marcas conocidas por su riguroso control de calidad, Y, a su vez, “tener cuidado al combinar múltiples fuentes de estos metales tóxicos en la dieta”.
Algunos alimentos que pueden tener niveles altos de plomo y cadmio son el marisco, las vísceras y suplementos de hierbas cultivadas en suelos contaminados de países con menos regulación (por ejemplo, China, Nigeria, India, Egipto). En el caso del cadmio, también algunas algas marinas, como la llamada hijiki.
Suelos y agua contaminada
Respecto al origen de los metales pesados en el cacao y el chocolate, explicaron: “Las principales fuentes de contaminación incluyen el suelo en el que se cultivan las plantas de cacao y el agua utilizada para el riego. La contaminación industrial, el uso de fertilizantes contaminados y la deposición atmosférica pueden elevar los niveles de metales pesados en los suelos agrícolas”.
“Las plantas de cacao absorben estos metales del suelo y del agua, lo que provoca su presencia en los granos y, posteriormente, en los productos de chocolate. La contaminación posterior a la cosecha durante el procesado y el envasado también puede contribuir a las concentraciones de estos metales en el producto final”, concluyeron.
Fuente: SINC.