“Farmacéuticos y farmacéuticas se transforman en importantes agentes de salud en sus farmacias ubicadas en los barrios”, sostuvo Leonardo Jurado en diálogo con Rosario3 respecto de la tarea de los profesionales farmacéuticos. El entrevistado es Pro-Secretario del Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Santa Fe, 2da Circunscripción.
En tal sentido, el experto profundizó: “Tanto farmacéuticas como farmacéuticos cumplen ese rol sanitario y donde más se destaca es en los barrios. Es esa cuestión de cercanía que los farmacéuticos tenemos con los vecinos, la que se revaloriza cuando alguno de ellos tienen necesidad de los servicios de los profesionales farmacéuticos frente a un problema de salud y se deciden a consultar".
En las Oficinas de Farmacia (es decir, los locales en donde las farmacias funcionan), los profesionales cuentan con "un arsenal terapéutico de venta libre", mediante el que pueden comenzar a resolverse cuestiones desde el mostrador de la farmacia. "También podemos guiarlos hacia la consulta médica", subrayó Jurado.
Y añadió: "Además podemos llevar adelante los controles que sus médicos les prescriben sobre todo a los pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles, como son los controles de la presión arterial, por ejemplo".
El vínculo con pacientes de tercera y cuarta edad
El Colegio de Farmacéuticos tiene firmado un convenio con Pami para tomar la presión en forma gratuita a sus afiliados. "Esta es una buena manera de ver cómo evolucionan los tratamientos. O si es preciso que sus médicos realicen algunos ajustes y hasta cambios en sus prescripciones", detalló el experto.
Entre la población que concurre a las Oficinas de Farmacia, se le dedica especial atención a los pacientes de la tercera y cuarta edad. Son los que más necesitan del asesoramiento y constituyen la población que más cuidan. "Se trata de los pacientes que concurren en forma periódica, están medicados con medicación crónica y que, además, están polimedicados. Justamente el rol del farmacéutico es central en esta instancia dado que la polimedicación a la que el médico debe recurrir exige control y atención permanente en el seguimiento de los tratamientos", afirmó Jurado.
En este aspecto, la tarea principal de las y los farmacéuticos es asesorar al paciente y a su núcleo familiar para que informen a sus médicos sobre la marcha de esos tratamientos, que a su vez exigen estar atentos ante la aparición de alguna interacción entre diferentes fármacos: "En estos casos, nos comunicamos con los médicos tratantes para tenerlos informados. Esta intervención puede contribuir a evitar inconvenientes y hasta fracaso de algunos tratamientos".
Para concluir, el profesional resaltó: "Uno de nuestros principales objetivos como agentes de salud es la educación para la salud, en la que nos formamos y hacemos nuestra contribución a la salud pública de la comunidad. Por ejemplo, la Oficina de Farmacia es un eslabón en las campañas públicas de salud y en la prevención y el cumplimiento del Calendario Nacional de Vacunación".