La Organización Panamericana de la Salud (OPS) anunció una alerta epidemiológica respecto del virus de Oropouche (OROV) y su posibilidad de transmisión vertical, es decir, de madres a hijos durante la gestación, a partir de casos que se están investigando en Brasil. La alerta rige para la región de América para reforzar la vigilancia ante la posible ocurrencia de casos similares en otros países con circulación de OROV y otros arbovirus.
Los casos
Este virus se transmite principalmente al ser humano por medio de la picadura de un jején, a la vez que por mosquitos de especie Culex. Su primera detección fue en Trinidad y Tobago en 1955 y luego se documentaron casos esporádicos en distintos países de América, como Brasil, Ecuador, Guyana Francesa, Panamá y Perú.
Desde el inicio de 2024 se notificaron alrededor de 7.700 casos confirmados en cinco países, con Brasil con mayor cantidad (6.976) y el resto en Bolivia, Perú, Cuba y Colombia. Dentro de los casos detectados, se sospecha de algunas transmisiones maternoinfantiles durante la gestación.
En un caso reciente, una mujer embarazada residente del estado de Pernambuco, presentó síntomas de Oropouche durante la semana 30 de gestación. Tras la confirmación en laboratorio de la infección por OROV, se reportó posteriormente la muerte del feto. Un segundo caso sospechoso fue notificado en el mismo estado brasileño, donde se observaron síntomas similares en una gestante, y resultó en un aborto espontáneo.
“La posible transmisión vertical y consecuencias en el feto aún están en investigación”, sostiene la OPS en la alerta epidemiológica. Y añade: “Sin embargo, se comparte esta información con los Estados Miembros para dar a conocer la situación y a la vez solicitar que estén atentos ante la posible ocurrencia de eventos similares en sus territorios”.
El 17 de julio, la OPS publicó directrices para asistir a los países en la detección y vigilancia del virus Oropouche ante posibles casos de infección maternoinfantil, malformaciones congénitas o muerte fetal. La Organización está colaborando estrechamente con los países donde se han confirmado casos para compartir conocimientos y experiencias.
La enfermedad
La enfermedad presenta síntomas como aparición repentina de fiebre, cefalea, rigidez articular, dolores en general y, en algunos casos, fotofobia, náuseas y vómitos persistentes que pueden durar entre cinco y siete días. Si bien los casos graves son raros, existieron algunos pacientes cuyos diagnósticos evolucionaron a meningitis aséptica. Una recuperación completa puede llevar varias semanas.
Para controlar el OROV, la OPS llama a los países de la región a implementar medidas de prevención y control de vectores, entre ellas, fortalecer la vigilancia entomológica, reducir las poblaciones de mosquitos y otros insectos transmisores y educar a la población sobre medidas de protección personal, especialmente a las embarazadas, para prevenir picaduras.
Entre las medidas recomendadas se encuentran: proteger las viviendas con mosquiteros de malla fina en puertas y ventanas, usar ropa que cubra piernas y brazos, especialmente en hogares donde haya personas enfermas; aplicar repelentes que contengan DEET, IR3535 o icaridina, y utilizar mosquiteros en camas o muebles donde descansen las personas.
Desde el incremento en el número de casos en la región, la OPS ha brindado apoyo técnico a los países afectados para reforzar su capacidad de detección y confirmación del virus Oropouche. Este esfuerzo incluye la distribución de reactivos para la detección molecular simultánea y de un protocolo que actualmente está disponible en 23 países para facilitar la detección temprana del virus.
Además, la OPS ha organizado diversas actividades como un taller internacional sobre la vigilancia molecular de arbovirus emergentes y reemergentes que reunió a expertos en salud e investigadores de Bolivia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Venezuela y Brasil.
Fuente: OPS/PAHO.