Desde hace exactamente 20 años, la Organización Mundial de la Salud conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre cada 14 de junio. El principal objetivo radica en reconocer la labor de quienes se disponen a donar, celebrando así la generosidad de la comunidad.
A través de la donación de sangre se logró salvar miles de vidas a lo largo de los años, por lo que el impacto de este acto de solidaridad merece su reconocimiento. Desde el organismo, además, señalaron: "También es un momento oportuno para abordar los retos pendientes y acelerar el progreso hacia un futuro en el que la transfusión sanguínea segura sea universalmente accesible".
Día Mundial del Donante de Sangre
Los objetivos de esta campaña son:
-Reconocer y dar las gracias a los millones de donantes voluntarios de sangre que han contribuido a mejorar la salud y el bienestar de millones de personas en todo el mundo.
-Dar a conocer los logros y desafíos de los programas nacionales de sangre y transmitir las mejores prácticas y las enseñanzas obtenidas.
-Poner de relieve la necesidad permanente de que haya donaciones de sangre periódicas y no remuneradas para lograr el acceso universal a transfusiones de sangre seguras.
-Promover una cultura que fomente la donación periódica de sangre en la juventud y el público en general, y aumentar la diversidad y sostenibilidad del grupo de donantes de sangre.
Requisitos para ser donante de sangre
Si bien la gran mayoría de personas puede donar, existen algunos lineamientos a tener en cuenta. Debe tenerse entre 18 y 65 años (en Argentina a partir de los 16 se permite con el consentimento adecuado, si se goza de buena salud y se llega al peso mínimo requerido), un peso mínimo de 50kg, y gozar de buena salud general al momento de donar. Por ende, quienes presenten síntomas gripales, úlceras bucales, infecciones gástricas, entre otras, deben aguardar que la sintomatología desaparezca.
En el caso de personas que se hayan realizado un tatuaje o piercing, no pueden donar durante los siguientes 6 meses. Por otra parte, quienes se hayan realizado algún procedimiento odontológico menor, deben aguardar 24 horas. Quienes hayan hecho lo propio con un procedimiento mayor, aguardar un mes.
Otra cuestión a tener en cuenta es la cantidad de hemoglobinemia para llegar al mínimo requerido. En Argentina, previo a la extracción se realiza un control que mide presión arterial, pulso, peso, temperatura y control de hemoglobina para aprobar o no al posible donante.
Además, quienes hayan viajado a zonas donde existen infecciones endémicas transmitidas por mosquitos, deben aguardar al menos 10 días para corroborar no haber contraído ninguna patología. A su vez, como medida para reducir el riesgo de transmisión de enfermedad de Creutzfeldt-Jakob variante por transfusión, muchos países también aplazan la donación por personas con antecedentes de viaje o residencia durante períodos de exposición acumulados definidos en determinados países o zonas.
Otra cuestión a tener en cuenta radica en las enfermedades de transmisión sexual, por lo que no se debe donar sangre cuando se han tenido actividades sexuales "de riesgo" en los últimos 12 meses, o si se han utilizado sustancias ilegales como cocaína, inyectables u otros.
Para quienes hayan atravesado un embarazo, el período de espera para ser donantes debe durar tantos meses como el embarazo. Tampoco se recomienda donar durante la lactancia, aguardar 3 meses luego del destete.
Tampoco se puede donar si se recibieron transfusiones de sangre, transplantes de órganos o tejidos, o si se estuvo bajo tratamiento médico o cirugía mayor (aguardar allí 12 meses) o esperar 6 meses en casos de cirugía menor, laparoscopía o endoscopía.
En casos en donde se tuvo contacto con sangre humana, secreciones, o se realizaron tareas quedando expuestos a las mismas, también se recomienda abstenerse por el tiempo sugerido desde el centro de donación.
También deben abstenerse quienes hayan sufrido sífilis, gonorrea u otras enfermedades venéreas, además de malaria o paludismo.
No podrán donar en forma definitiva quienes padecen enfermedades cardíacas (angina de pecho, infarto, arritmias, trombosis), si se tienen o tuvieron convulsiones, desmayos o epilepsia, si se está en tratamiento con insulina por diabetes, si se tiene o se tuvo cáncer y se recibieron quimioterapias o radiaciones, quienes tienen anemias severas, hemorragias o problemas de coagulación, quienes tienen enfermedad de Chagas, quienes tuvieron hepatitis B o C o se tuvo contacto sexual con personas con estas patologías sin cuidarse; si se tuvieron pruebas positivas para VIH.
Antes de la donación, se recomienda ingerir puntualmente líquidos azucarados y frutas, no así láctos ni alimentos grasos.
Las distintas campañas de concientización buscan que las personas aptas para donar lo hagan al menos dos veces al año, aunque los hombres pueden hacerlo hasta 4 veces al año y las mujeres hasta 3 veces, con un intervalo de dos meses entre cada donación. A su vez, quienes deseen también pueden registrarse como donantes de médula ósea.