Investigadores e investigadoras del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) hallaron principios para encarar la búsqueda de nuevos candidatos a fármacos contra la bronquiolitis y otras infecciones.

Para ello, las y los especialistas analizaron el rol de las proteínas de replicación del virus sincicial respiratorio (VSR) en la formación de ciertas estructuras que crean los virus en el interior de las células para autoperpetuarse e infectar, es decir, las llamadas "fábricas virales".

El hallazgo provee un nuevo flanco terapéutico para el VSR y, potencialmente, otros patógenos virales que usan el mismo mecanismo, como los que causan sarampión, Covid-19 y ébola, según informó el Conicet en un comunicado.

El VSR

El VSR consta de un puñado de genes que producen las proteínas necesarias para su replicación y el ensamblaje de su partícula. Una vez que infecta una célula, comienza a producirlas y se van acumulando hasta que, en un determinado momento, se condensan en estructuras líquidas que asemejan gotas, las "fábricas virales", donde se replica su genoma.

En un artículo publicado en el Journal of Molecular Biology (JMB), el grupo del Instituto de Investigaciones Bioquímicas de Buenos Aires (IIBBA), con el biotecnólogo y doctor en Bioquímica, Mariano Salgueiro, determinó que una de las proteínas clave de la replicación viral, denominada fosfoproteína, es el agente que nuclea la formación de esas estructuras observadas in vitro como gotas, y que interactúa con el resto de las proteínas.

Mientras que en otro trabajo que encabezó la bióloga y becaria doctoral del Conicet, Araceli Visentin, en la revista Viruses, se reconstruyó la formación de los condensados en condiciones controladas y se pudo determinar la participación de otra de las proteínas (llamada M2-1), que acelera la maquinaria de síntesis del ARN como modulador de las fábricas virales.

A su vez, se describió cómo esta proteína forma condensados con el ARN, lo que sería un talón de Aquiles para el virus ya que se podría intentar interceptar esa formación como una manera de evitar que se replique.

El VRS pertenece a una familia de virus que incluye patógenos humanos severos como sarampión, rabia, ébola, parainfluenza y metapneumovirus, entre otros. Esto sugiere que los recientes hallazgos permitan pensar en la posibilidad de desarrollar antivirales de amplio espectro.

El VSR es altamente contagioso y el principal responsable de la bronquiolitis, una infección respiratoria aguda que en las personas sanas ocasiona resfríos comunes, pero que en bebés menores de un año, adultos mayores y pacientes inmunocomprometidos puede resultar en enfermedad grave.

A mediados de este año, la Argentina transitó un brote importante de bronquiolitis, con un adelantamiento en la aparición de los casos y un 56% de aumento frente al mismo período de 2019 (el año con más casos de los últimos nueve).

En tal sentido, el desarrollo de nuevas tecnologías terapéuticas basadas en antivirales de espectro amplio o específico es fundamental de cara a la próxima implementación de nuevas vacunas y anticuerpos monoclonales para la prevención primaria de la enfermedad en el mundo.