A poco más de dos meses de iniciado el gobierno de Javier Milei, ex presidenta y vicepresidenta Cristina Kirchner lanzó un duro documento en contra de sus medidas económicas y políticas, en las que señala que tanto el mega Decreto de Necesidad y Urgencia y la ley Ómnibus suponen “una reforma encubierta de la Constitución Nacional”.
En un análisis de 33 páginas titulado “Argentina en su tercera crisis de deuda. Cuadro de situación”, Cristina hace un repaso de las distintas políticas económicas practicadas desde 1976 y sus efectos sociales y políticos; y calificó a Milei como “un showman economista en la Rosada” que busca “volver a endeudar a la Argentina en dólares, sin límites y bajo jurisdicción extranjera sin pasar por el Congreso”.
De hecho, Cristina abre su análisis con una sugerente cita del propio Juan Bautista Alberdi, a quien suele mencionar el presidente libertario, justamente en contra del endeudamiento: “Tomar capitales a préstamo para reemplazar los capitales destruidos por la crisis, no es remediar la pobreza, sino agravarla; la riqueza de otro no es la riqueza del país. La deuda representa más la pobreza que la riqueza. Endeudarse no es enriquecerse, sino exponerse a empobrecerse por la facilidad con que siempre se gasta lo ajeno”.
Entre otras cosas, la ex jefa de Estado criticó que “a pesar de haber sostenido como caballito de batalla que con los mismos de siempre no se podían obtener resultados distintos, produjo, ni bien fue electo, un insólito reciclaje de personajes y ex funcionarios. El más preocupante es el de Luis Caputo, artífice del endeudamiento serial del gobierno de Mauricio Macri y del retorno del FMI a la Argentina”.
"¿Cuál es la lógica de repetir como ministro de Economía a Luis Caputo? ¿Por qué ahora va a hacer bien las cosas si, en su momento, lo tuvieron que echar por haber fracasado?", planteó Cristina y recomendó a Milei "analizar seriamente que quienes fueron los amplios derrotados en los últimos comicios presidenciales intentarán condicionarlo desembarcando en las principales áreas de gobierno e incluso tomar el control político y desplazarlo del manejo del Poder Ejecutivo si lo consideran necesario".