Otro fuerte cambio en el Ministerio de Seguridad de Santa Fe: Jorge Lagna renunció este martes a su cargo y también se va la jefa de la Policía provincial, Emilce Chimenti, según confirmaron fuentes oficiales. Y ya están confirmados los reemplazos.
El gobernador Omar Perotti se reunió con Lagna al anochecer en la sede de la Gobernación en Rosario, donde le aceptó una dimisión que, según versiones, él mismo le pidió como un golpe de efecto ante el espiral de violencia e inseguridad, sobre todo en la ciudad.
Del encuentro también participó el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, quien a la salida habló con la prensa y señaló que "se decidió que el ministro diera un paso al costado, y si se va el ministro también se va la jefa de Policía".
"Básicamente es un tema de resultados y el ministro definió que era un ciclo cumplido", agregó Corach, sin más argumentos.
En lugar de Lagna asumirá Rubén Rimoldi, "un comisario general retirado de la fuerza", dijo Corach, abocado últimamente a algunas tareas ejecutivas, mientras que la jefatura policial recaerá en Miguel Ángel Oliva, que fue jefe de la Unidad Regional II durante el gobierno socialista.
Perotti acompañó la decisión preocupado no sólo por la situación general del área sino también, según trascendió, por la impunidad de las pintadas de la madrugada en varios lugares de Rosario, entre ellos la propia fachada de la gobernación, con mensajes de protesta contra el "plomo" (por las balas) y el "humo" (de las islas).
La reunión no estaba en agenda y la convocó Perotti mientras Lagna preparaba una presentación en la Legislatura santafesina por el estado de situación.
Este miércoles, el ahora ex ministro iba a realizar una exposición ante legisladores provinciales, con temario abierto pero en medio de la ola de violencia e inseguridad en Rosario, producto de enfrentamientos entre bandas.
Lagna deja el cargo en medio de una crisis de seguridad pública con el número más alto de homicidios en lo que va del año en Rosario en comparación con la última década.
Por la tarde, fue asesinado un joven de 20 años durante una balacera en la que una mujer y un niño de 13 resultaron heridos, una semana después del asesinato de otro chico de la misma edad y de un comienzo de agosto sumamente violento.