El ríspido traspaso de gobierno en la provincia tuvo uno de sus puntos más calientes en el rubo Seguridad. Luego de que el nuevo gobernador Omar Perotti criticara este miércoles, durante su asunción, a la anterior gestión y llamara a "cortar los vínculos con el delito", el ahora ex ministro Maximiliano Pullaro salió al cruce.

“Hubiésemos esperado del discurso del gobernador una convocatoria similar a la que hizo Alberto Fernández –también presenten en la Legislatura santafesina– unos minutos antes. Sin embargo eligió reemplazar la propuesta por el agravio y el diagnóstico falaz”, escribió por la noche Pullaro en Twitter.

Minutos antes, Perotti aseguró que en Santa Fe el narcotráfico “se ha extendido por el desdeño estatal cuando no en un pacto de gobernabilidad directa o indirecta con el delito”.

Y en ese sentido pidió: “Hay que cortar los vínculos con el delito y es prioridad que el Estado vuelva con toda la fuerza de donde nunca debió retirarse. Sin orden no se puede vivir en paz y ello requiere una Policía adecuada a la realidad democrática y que sea eficiente”.

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“La Policía se ha divorciado de la sociedad y ésta le ha perdido confianza –completó en su crítica el flamante mandatario–; las principales victimas de delitos son los pobres, los trabajadores”.

Y más temprano, antes del acto de jura en la capital provincial, el propio reemplazante de Pullaro, Marcelo Saín, analizó que "las bases normativas básicas y vigentes de la policía provincial son un cocoliche y vienen desde el año 1975".

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Además, calificó de "cucardas" algunas denominaciones de secciones, como TOE (Tropas de Operaciones Especiales) y PDI (Policía de Investigaciones). "Tiene que haber un orden con una nueva legislación, pero eso llevará un tiempo. Tiene que haber una Ley de policías con una nueva carrera y un proceso más nuevo y moderno”, señaló el nuevo funcionario.

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