Ya es una costumbre en la política no respetar los mandatos y pegar el salto a otro lugar antes de tiempo. Es más aquellos que ocupan bancas legislativas a mitad de mandato compiten por cargos ejecutivos o bancas parlamentarias de mayor rango. Los Ejecutivos han completado equipos con legisladores que debieron dejar sus lugares por los que fueron electos. Una muestra es el gabinete del gobernador Maximiliano Pullaro quien apeló a diputados, senadores, concejales y autoridades comunales de su frente Unidos. En el Concejo municipal de Rosario cuatro ediles dejaron su lugar este año y fueron reemplazados. Y hasta un senador nacional se bajó para formar parte de la renovada legislatura provincial.
Miguel Tessandori llegó a la política al frente de un espacio (Volver a Rosario) independiente de otros partidos. Es más, confrontó en las elecciones de 2021 a su ex compañero de De 12 a14, Ciro Seisas quien encabezaba la lista del intendente Pablo Javkin y a Anita Martínez (PRO), e ingresó al Concejo municipal junto a Valeria Schvartz. Este año enfrentó a Javkin en la interna para la intendencia y salió segundo trayéndole varios dolores de cabeza a quien finalmente resultó reelecto. Pero para las generales hubo acuerdo y lo terminó apoyando. Hoy forma parte del gabinete municipal como secretario general.
Por eso, Tessandori dejó su banca al empresario Hernán Calatayud, que estaba tercero en su lista de hace dos años. Y Schvartz también se fue del Palacio Vasallo ya que fue convocada por Pullaro para ocupar la subsecretaría de Infraestructura Escolar. En su lugar asumió Marisol Bracco, cuarta en la lista.
Seisas también ya dejó de ser concejal. Es que se convirtió en senador departamental por Rosario en 2023, cargo que ocupará durante los próximos cuatro años. Su reemplazante es Mariano Roca, presidente de Creo, el partido de Javkin. El periodista debió sortear una competitiva primaria dentro de Unidos con otros ediles que también iban por escalar al Senado, entre otras, la misma Anita y la socialista Verónica Irízar.
Del cuerpo deliberativo local además se fue Martín Rosúa quien había vuelto hace dos años, detrás de Martínez, y formó parte de la lista de diputados provinciales de Unidos que se impuso en forma contundente el 10 de septiembre. Cambió el Concejo rosarino por la Cámara Baja santafesina.
El escaño que dejó Rosúa fue motivo de una disputa entre la cuarta de la lista de Anita de 2021 (Soledad Ruiz de Galarreta) y el quinto (Agapito Blanco). El pleno del Concejo terminó aprobando el ingreso del último después de un pronunciamiento en ese sentido por parte de la Justicia electoral. Blanco, ex concejal por el PRO, juró como nuevo edil en la última sesión del año. Pero formará parte del bloque de Volver a Rosario, junto a Calatayud y Bracco, donde venía desempeñándose como secretario.
Por si fuera poco, Susana Rueda, quien había sido reelecta como concejala este año en la lista que encabezó la presidenta del cuerpo María Eugenia Schmuck, renunció a su banca para convertirse en la ministra de Cultura provincial. Antes se aseguró que una mujer de su espacio político -el socialismo de Antonio Bonfatti-, Alicia Pino, ingresara en su reemplazo.
Los refuerzos de Pullaro
El gobernador se nutrió de recursos humanos de su extrema confianza para formar el gabinete. Así fue que apeló a dirigentes que con mandatos parlamentarios por completar o a cumplir. Además de Rueda y Schvartz, se trajo de la Cámara de Diputados de la Nación a Victoria Tejeda, legisladora con mandato hasta 2025, para el Ministerio de Desarrollo Social. Su sillón fue ocupado por Melina Giorgi que estaba en la lista de JxC de 2021. La flamante diputada ya juró tras haber sido presidenta comunal de la localidad de Fuentes desde 2017, la primera mujer en ocupar ese lugar.
Pullaro incorporó a Lisandro Enrico como ministro de Obras Públicas. El senador provincial (departamento General López) había obtenido su cuarto mandato este año con más del 70 por ciento de los votos. Con polémica, Enrico no renunció a su banca y ésta fue ocupada por la suplente Leticia Di Gregorio, alguien que venía trabajando en su equipo desde hace tiempo.
Al Senado también llegó Pablo Verdecchia (departamento Belgrano), otro que dejó el cargo para donde había sido elegido hace dos años: la intendencia de Armstrong.
El mandatario provincial ocupó la estratégica cartera de Gobierno con otro de sus hombres de confianza: Fabián Bastía. Este había sido electo diputado provincial e iba por su segundo mandato, fue reemplazado por Germán Scavuzzo, el primer suplente de la lista y cercano al grupo radical de María Eugenia Schmuck. A diferencia de Enrico, renunció a la banca. El hoy ministro estuvo al frente de la Empresa Provincial de la Energía cuando Miguel Lifschitz fue gobernador.
Además, a la Secretaría de Municipios y Comunas llegó el presidente comunal de San Jerónimo Sud, Horacio Ciancio, quien había sido reelegido por amplio margen y fue uno de los armadores del espacio pullarista desde la liga de intendentes radicales. El funcionario tomó licencia sin goce de sueldo en la comuna y ahora la gestión es llevada adelante por dos personas de su elenco.
Una de las grandes sorpresas fue la de Dionisio Scarpín. Era uno de los senadores nacionales por Santa Fe, electo junto a Carolina Losada en 2021, y tenía mandato hasta el 2027. Dejó ese escaño para jurar como diputado provincial ya que formó parte de la lista que encabezó Clara García. Su interés por estar cerca de la provincia y el anhelo de competir por la gobernación, habrían pesado en la decisión.