Si hay tantos precandidatos es por una simple razón: no está “el” candidato, un nombre que por sí mismo, por su propio peso electoral, pueda ordenar las aspiraciones de los distintos dirigentes que componen el peronismo santafesino de cara a las elecciones de este año.
Lo cierto es que un nuevo nombre se sumó a la ya larga lista de quienes se anotan a la carrera para la sucesión de Omar Perotti: “Es un sueño, ojalá se haga realidad”, dijo el intendente de Funes, Roly Santacroce, este jueves a la mañana en el programa Radiópolis, de Radio 2.
De muy buena relación con Perotti, a quien reivindica como líder absoluto del peronismo provincial, Santacroce ya le avisó al gobernador de su decisión de empezar a recorrer todo el Gran Rosario para auscultar su potencialidad electoral.
Para el perottismo sería un Plan B, cuya sobrevida dependerá de lo que digan las encuestas a partir de marzo, más cerca de los cierres de lista previstos para mayo. El Plan A es Roberto Mirabella, integrante del círculo íntimo del gobernador, que justamente tiene como debilidad su bajo nivel de conocimiento sobre todo en el Gran Rosario.
Tampoco los otros precandidatos ya lanzados despegan en las encuestas: ni Leandro Busatto, ni Marcos Cleri, ni Eduardo Toniolli consiguen por ahora mover el amperímetro.
Todos tienen, eso sí, padrinos de peso: ya se mencionó la relación de Perotti con Mirabella; Busatto es el hombre de confianza del ahora jefe de Gabinete Agustín Rossi, Marcos Cleri es de la ultracristinista agrupación La Cámpora, y Toniolli del Movimiento Evita, hoy muy cercano al presidente Alberto Fernández.
Esta lógica la podría romper, si decide jugar, Marcelo Lewandowski. El ex comentarista deportivo y actual senador nacional no responde a ninguna de las grandes tribus internas, pero es una figura con alta popularidad y antecedentes electorales de mayor peso que sus eventuales competidores internos: en el 2019 obtuvo la senaduría departamental en representación de Rosario con un cómodo triunfo ante la entonces intendenta Mónica Fein y dos años después llegó a la Cámara alta como el candidato del acuerdo entre Perotti y Cristina Kirchner. En los comicios de 2021 perdió con Carolina Losada, pero consiguió una cantidad de votos que le garantizó al peronismo santafesino un piso del 32 por ciento y fue el más votado en el departamento Rosario.
Lewandowski tiene abiertas tres posibilidades: competir a nivel provincial, a nivel local como candidato a intendente o no hacerlo para ninguno de los dos cargos y quedarse en el Senado. Esta última opción parece la más difícil, salvo que aspire a una jubilación temprana de la carrera política, a la que ingresó hace apenas cuatro años.
Lo que más le tienta es ir por la Gobernación, pero necesita apoyos para encarar una campaña por el amplio, complejo y diverso territorio santafesino. Perotti no se lo da y estirará hasta último momento la posibilidad de hacerlo, con la intención de jugar con alguna carta que considere propia y, en caso de dárselo, condicionar el armado de las listas legislativas –que el gobernador está dispuesto a encabezar– y hasta un eventual gabinete. El senador, mientras tanto, viene hablando con sectores cristinistas, con la idea de que el peronismo podría repetir en Santa Fe una fórmula conocida: llegar a la interna con un candidato del aparato provincial y otro del aparato nacional.
De su decisión, dependerá también cómo se ordena el PJ para la competencia por la Intendencia de Rosario, donde por distintas circunstancias el peronismo entiende que está en condiciones de obtener un triunfo que sería histórico.
Una de esas razones es la posibilidad de cerrar un acuerdo con Ciudad Futura, que pondría a Juan Monteverde a disputar la interna abierta con otros precandidatos que pueden resultar competitivos como Roberto Sukerman, que en 2019 quedó a menos de dos puntos del actual intendente Pablo Javkin y se lanzará oficialmente en los primeros días de marzo, el perottista Alejandro Grandinetti, el massista ministro de Transporte de la Nación Diego Giuliano y, en caso de inclinarse por esta opción, el propio Lewandowski.