Mientras que el canciller argentino Jorge Faurie sostuvo que la renuncia de Evo Morales a la presidencia no fue producto de un golpe de Estado, su antecesora en el Palacio San Martín, Susana Malcorra, se despegó del gobierno de Mauricio Macri y aseguró que hay tres elementos que permiten hablar, sin margen de dudas, de golpe de estado.
En diálogo con Radio 2, Malcorra refutó a Faurie que este lunes había dicho que que Bolivia está en un "impasse" y que no había "elementos para describir esto como un golpe de Estado".
"Que esto se diera en un contexto muy complejo donde hay cuestiones que se pueden poner sobre la mesa como motores que llevaron a la expresión de la gente en las calles, no quita que uno adjetivamente tenga que hablar como golpe de Estado y así lo considero", aseveró la ex canciller en contacto con el programa A diario (Radio 2). Y aclaró que ello tampoco supone un cambio de régimen.
Y explicó que “hay tres elementos objetivos, no cuestionables” que permiten hablar de golpe: “Primero, que se haya interrumpido el mandato de un presidente democráticamente electo. El procedimiento por el que se interrumpió (el mandato) no es el establecido constitucionalmente, es decir, a través del Congreso".
"Eso no fue así. Él (por Morales) renunció ante una sugerencia por parte de las Fuerzas Armadas. Y la tercera (condición) es que las fuerzas armadas tuvieron un rol importante en ese desenlace", completó y remarcó: "Cuando uno puede decir estas tres cosas, sí se puede considerar esto un golpe de Estado”.
La posición sobre el conflicto en Bolivia volvió a generar choques entre Macri y el presidente electo Alberto Fernández al no arribar a un acuerdo para emitir un comunicado conjunto en repudio al "golpe de Estado".
"No entiendo por qué el gobierno no reconoce que fue un golpe de Estado", reconoció Malcorra.
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