Detrás del asesinato ocurrido este martes en pleno cortejo fúnebre en Villa Gobernador Gálvez asoma en la investigación un trasfondo narco y otras situaciones gravísimas, como la ejecución del crimen del hermano de la víctima por error y la posible connivencia policial con una organización criminal. Marcelo Procopp, quien fue acribillado a tiros en inmediaciones del cementerio San Lorenzo, tenía un antecedente que deberá seguir de cerca el fiscal Gastón Ávila, que es una detención en 2016 junto con Marcelo Bassi, hermano del "Pollo".
Los dos primeros crímenes del año en Villa Gobernador Gálvez ocurrieron en 48 horas. El domingo, cerca de las 19, fue asesinado de varios balazos Javier Alejandro Procopp, de 36 años, en Edison al 800. Estaba en la puerta de su casa, cuando recibió múltiples impactos de balas que fueron disparadas desde un auto. Su familia no salía del asombro por el homicidio. Su hermano Marcelo dio una nota al día siguiente en Cada Día (El Tres) y este martes a las 9.30 lo fueron a buscar entre la gente que estaba presente y se aseguraron el objetivo del ataque: lo ejecutaron de doce tiros calibre 9 milímetros a corta distancia.
Los indicios que tienen los investigadores policiales es que el blanco de los sicarios siempre fue Marcelo Procopp y que el domingo pasado mataron a su hermano por error. En línea con esa hipótesis, se sigue la pista de la relación de Marcelo con Marcelo Bassi, hermano de Luis "El Pollo", preso y condenado por un crimen y absuelto por el homicidio de Claudio "Pájaro" Cantero, líder de Los Monos.
Bassi, según fuentes judiciales sigue operando pese a estar tras las rejas. Un "referente" de su banda que sonó con fuerza en los últimos tiempos en su territorio de Villa Gobernador Gálvez fue el de Ariel Carlos Gaeta, conocido como "Jerry". Fue asesinado el año pasado en Savio al 2500 y por ese homicidio fue detenido Héctor Daniel Noguera, alias "Gordo Dani", lugarteniente de Los Monos y barrabrava de Newell's.
Lo que asoma tras los dos primeros crímenes del año en Villa Gobernador Gálvez es la misma histórica pelea territorial entre Bassi y Los Monos y una reorganización entre esas organizaciones que quedaron descabezadas, una porque mataron a su líder y la otra porque su jefe está en la cárcel.
Tampoco los investigadores dejan de lado cómo fue el último homicidio en la vecina ciudad: en pleno cortejo fúnebre, donde los sicarios sabían dónde y cuándo iba a estar su próximo blanco del ataque, lo que hace suponer que pudo existir una suerte de "liberación de zona" por parte de la policía en connivencia con Los Monos.