Una denuncia intrafamiliar de abuso sexual contra un hombre que vive en la zona oeste de Rosario desató la furia de sus vecinos, que fueron hasta su casa para reclamarle que abandone el barrio y hubo momentos de suma tensión, incluso con detenidos.
La acusación data de febrero pero esta semana la noticia llegó al sector de la ciudad donde vive el presunto abusador, en calle Nicaragua casi Pasco, y hasta allí se acercó un nutrido grupo de personas para exigirle que se fuera, mientras que el hombre es investigado en libertad.
El acusado dejó su domicilio por la mañana pero a la tarde continuaban algunos disturbios porque su familia directa –su mujer, una hija y su suegra– también inició una mudanza y es apuntada por proteger al hombre.
La denuncia es por un supuesto abuso contra una menor de edad, familiar pero no conviviente, y a raíz de su difusión en el barrio se reportaron más casos que tendrían a chicas de la zona como víctimas, informó Radio 2.
En la cuadra había, todavía a media tarde, un intenso despliegue policial –unos 15 patrulleros– luego de que más temprano se registraran disturbios entre algunos manifestantes que arrojaron piedras a los uniformados y éstos que respondieron con balas de goma. En ese marco, había cuatro personas detenidas.
