Los Tribunales Provinciales de Cañada de Gómez condenaron a 25 años de prisión efectiva a un hombre de 45 años oriundo de Totoras por 3 violaciones sexuales contra menores de edad. También estaba acusado por el delito de grooming contra dos adolescentes, pero fue absuelto por beneficio de la duda “atento carencias probatorias”, según adelantaron desde Fiscalía. Una de esas nenas es la hija de Daniel, quien había contado en mayo pasado, cómo fue la cruzada personal que encabezó contra el acosador que resultó ser un violador.
El tribunal pluripersonal de primera instancia a cargo del debate, compuesto por los jueces Strólogo, Romanini y Usandizaga, condenó a Alberto Martín M. de 45 años a la pena de 25 años de prisión efectiva por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado en 3 hechos, absolviéndolo por el estricto beneficio de la duda por el delito de grooming.
El fiscal Santiago Tosco le había imputado hechos ocurridos desde junio del año 2018 hasta el mes de abril de 2019 en Totoras: haber abusado sexualmente de una víctima menor de edad, habiéndola previamente contactado por Facebook, habiéndola hostigado, amenazado, obligándola a encontrarse con él, abusando de ella, para luego continuar con amenazas. También se le atribuyó haber abusado en reiteradas ocasiones de otra víctima menor de 7 años hasta sus 17 años en la localidad de Fray Luis Beltrán y de un niño desde los 6 años hasta los 10.
Por su parte se le atribuyó haberse contactado con otras 3 víctimas menor de edad, de 11, 14 y 15 años, mediante Facebook e Instagram respectivamente, exigiéndoles imágenes íntimas con el fin de menoscabar su integridad sexual. Una de esas nenas es la hija de Daniel, quien este lunes esperaba una condena a M. por haberla acosado con apenas 14 años. Sin embargo, consideró positivo que hayan sido aprobados los ataque sexuales cometidos.
“Mi hija tenía miedo y vergüenza, pero yo siempre le agradecí por haberme contado. A mi hija no le pasó lo mismo porque confió en mí. Quedó en el grooming porque le pusimos un límite”, había dicho Daniel a Rosario3 antes de la condena por las violacines contra otros menores, consciente de que gracias a haber intervenido y acudido a la Justicia, el agresor frenó sus intenciones de encontrarse con la chica.
“Este tipo tenía cierta confianza con mi familia, nunca te ibas a imaginar que pudiera hacer algo así, por eso siempre que puedo digo que los chicos y los padres hablen de esto, que los chicos les cuenten y que los padres no los culpen. Confíen en sus hijos y hagan la denuncia, las veces que sea necesario”, advirtió por entonces este papá, quien lanzó una verdadera cruzada contra este tipo de accionar.