Dos personas fueron aprehendidas este miércoles a la tarde en un domicilio del barrio Empalme Graneros, en la zona noroeste de Rosario, donde llegó la Policía siguiendo el rastro de un celular robado. Encontraron un aguantadero donde había varios teléfonos más y un arma de fuego.
La búsqueda comenzó cuando una joven a la que le robaron su Iphone días atrás, a punta de pistola en Pérez, detectó que el aparato fue encendido y se activó la señal de GPS. Acompañada de su padre, pidieron ayuda a policías que patrullaban en un móvil, informó Telenoche (El Tres).
Junto a ellos, los uniformados se dirigieron entonces a una vivienda de calle La Salle al 5900, donde marcaba la geolocalización. Allí encontraron a un hombre en la puerta que dijo estar esperando a su hermana que estaba por llegar. Cuando ésta arribó, accedieron sin resistencia a que los policías ingresaran.
De esa manera, en una mesa de la casa detectaron una caja donde había once teléfonos celulares cuya procedencia no pudo ser acreditada. Y consultados sobre si tenían algún elemento de peligrosidad, entregaron una escopeta calibre 12 con cartuchos.
Las dos personas acusadas son mayores de edad y quedaron demoradas en la comisaría 12ª.